Kim Yo Jong, hermana de Kim Jong Un, será la primera representante de la familia gobernante norcoreana en visitar Corea del Sur; lo hará como parte de los acercamientos entre ambas naciones de cara a los Juegos Olímpicos de Pyeongchang.
Yo Jong, una alta dirigente del único partido de Corea del Norte, formará parte de la delegación de alto nivel que debe llegar al Sur el viernes encabezada por el jefe de Estado honorífico de Corea del Norte.
Yo Jong fue ascendida en octubre a miembro del buró político del Partido de los Trabajadores de Corea; se sabe que está a cargo de la propaganda del partido gobernante. En fechas recientes, se le ha visto acompañando a Kim Jong Un en “visitas de orientación sobre el terreno”.
Se cree que Kim Yo Jong se reunirá con el presidente surcoreano Moon Jae-In y le entregará una carta personal de su hermano expresándole su deseo de que los Juegos sean un éxito.
Kim Yo jong está en el objetivo de las sanciones de Estados Unidos contra los abusos de los derechos humanos de Corea del Norte, pero no está en la lista negra del CSN, según reportó Yonhap.
Kim Yo jong y Kim Jong Un nacieron de la unión de Kim Jong Il y su tercera cónyuge, la exbailarina Ko Yong Hui.
Kim Jong Un pertenece a la tercera generación que preside el país, antes lo hicieron su padre Kim Jong Il y su abuelo Kim Il Sung, fundador de Corea del Norte.
Otros miembros de la familia han tenido destinos funestos: El tío de Kim Jong Un fue ejecutado por traición en 2013 y su hermanastro Kim Jong Nam fue asesinado en el aeropuerto de Kuala Lumpur hace un año.
El acercamiento entre las dos Coreas
Kim Jong Un aceptó en su discurso de Año Nuevo la invitación de Seúl a participar en los “Juegos de la Paz” precipitando una serie de encuentros a raíz de los cuales ambos países decidieron desfilar juntos y formar un equipo conjunto de hockey sobre hielo femenino.
La delegación norcoreana estará oficialmente dirigida por Kim Yong-Nam, presidente del Presidium de la Asamblea Popular Suprema, el parlamento controlado por el partido único, cargo que le otorga funciones honoríficas de jefe de Estado.
Sin embargo, pese a su rol diplomático su poder político real es incierto. No tiene el título de presidente de Corea del Norte, como tampoco lo tiene su líder Kim Jong-Un. Pese a que murió en 1994, este título sigue encarnado por Kim Il-Sung, presidente eterno de la República Democrática Popular de Corea.
La delegación norcoreana tendrá también en sus filas a Ri Son-Gwon, jefe del Comité para la Reunificación Pacífica del país, equivalente al ministerio surcoreano de Unificación, encargado de los asuntos intercoreanos.
Según analistas, Corea del Norte parece tener la intención de usar los JJ. OO. de PyeongChang para aliviar su aislamiento diplomático y, eventualmente, debilitar las sanciones internacionales sobre sus programas nucleares y de misiles.
(Con información de AFP)