Ante la escasez nacional de sulfuro de sodio, insumos clave para el curtido de piel, el Gobierno de Guanajuato, a través de la Secretaría de Economía, inició gestiones con autoridades federales para facilitar su importación y evitar una crisis en el sector curtidora, uno de los pilares económicos del estado.
La situación ya afecta gravemente a la industria: unas 400 tenerías han detenido parcial o totalmente su producción debido a la falta de sulfuro de sodio, un químico indispensable para el proceso de curtido en húmedo.
La producción diaria, que habitualmente alcanza los 50 mil cueros, se ha visto reducida por paros intermitentes de uno, dos o más días en los últimos dos meses.
De no resolverse en los próximos 15 días, el panorama podría agravarse, advirtió Vicente Lahud, presidente de la Cámara de la Industria de Curtiduría del Estado de Guanajuato (Cicur).
Esta crisis se originó tras el incendio, hace dos meses, de la planta de Solvay Química en Monterrey, principal proveedor nacional. Ante ello, el gobierno estatal acompaña a las empresas en la gestión de permisos ante COFEPRIS, CICOPLAFEST y SEMARNAT, necesarios para importar entre 700 y 800 toneladas mensuales del insumo y mantener operativa la cadena productiva.
Además de las gestiones ante COFEPRIS, el gobierno de Libia Dennise García colabora con la Secretaría de Economía federal y representantes de la industria, como Alejandro Malagón y Alejandro Gómez Tamez, de CONCAMIN, para designar un enlace directo que atienda la problemática de forma inmediata.
El desabasto no sólo impacta a las curtidurías, sino también a sectores vinculados como el del calzado, automotriz y de vestir.
En respuesta, el estado impulsa, en línea con el Plan Estatal de Desarrollo 2025, proyectos de innovación y sustentabilidad, como la creación de un laboratorio especializado en la Universidad de Guanajuato, infraestructura para manejo de residuos y valorización de descarnes.