Un reciente estudio de la Universidad de São Paulo (USP, Brasil) ha revelado nuevos detalles sobre la Subida del Río Grande (RGR), una posible meseta basáltica continental ubicada en el Océano Atlántico Sur, a 1,200 kilómetros de la costa de Brasil.
Los investigadores han determinado que esta formación geológica tiene una extensión similar a la superficie de España, según un artículo publicado en la revista Scientific Reports tras una década de análisis.
¿QUÉ DESCUBRIERON LOS CIENTÍFICOS DE BRASIL?
La investigación identificó que la meseta está compuesta por una cadena de montes submarinos, con arcillas rojas y minerales característicos de la alteración tropical de rocas volcánicas, como:
- Caolinita
- Magnetita y magnetita oxidada
- Hematita
- Goethita
Además, se analizaron muestras de arcilla roja extraídas desde una profundidad de 650 metros, lo que permitió a los científicos determinar la edad de la formación.
El profesor Luigi Jovane, supervisor del estudio, explicó que la investigación confirmó la presencia de la isla sumergida y que ahora se debate si esta podría incluirse en la plataforma continental brasileña. “Geológicamente, logramos descubrir que las arcillas se formaron después de las últimas actividades volcánicas registradas hace 45 millones de años, es decir, hace entre 30 y 40 millones de años, como consecuencia de las condiciones tropicales”, señaló Jovane.
NUEVA DISPUTA INTERNACIONAL DEL RÍO GRANDE
La Elevación del Río Grande ha sido considerada una zona de aguas internacionales, bajo la custodia de la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos de las Naciones Unidas.
Sin embargo, Brasil ha solicitado una extensión de su plataforma continental más allá de las 200 millas marítimas para incluir esta área dentro de su territorio. “Es fundamental entender los servicios ecosistémicos y los procesos naturales que actúan en la Elevación de Río Grande”, destacó el profesor Jovane.
UN NUEVO MAPA DE LA SOBERANÍA MARÍTIMA DE BRASIL
El hallazgo de una posible isla sumergida del tamaño de España no solo tiene implicaciones geológicas y ecológicas, sino que también podría generar cambios en la soberanía marítima y la explotación de recursos naturales en la región.
Este estudio marca un paso clave en la comprensión de la evolución de la Tierra y en el reconocimiento de territorios submarinos, lo que podría redefinir los límites marítimos de Brasil en los próximos años. N