Los recientes comentarios del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, sobre que Canadá debería convertirse en el estado número 51 han generado polémica y preocupación en el país vecino. Lo que inicialmente comenzó como un comentario aparentemente casual durante una cena entre Trump y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, ahora ha tomado un tono más serio, según indicó el ministro de Finanzas de Canadá, Dominic LeBlanc.

La postura de Canadá ante las declaraciones de Trump

LeBlanc afirmó que estas declaraciones tienen como propósito “crear caos” y “sembrar confusión” en las relaciones bilaterales, las cuales son históricamente sólidas. Además, reiteró que Canadá nunca considerará tal posibilidad y calificó la idea como irrealizable.

Por su parte, el Ministro de Migración, Marc Miller, desestimó las declaraciones de Trump como “ridículas” y afirmó que Canadá no será anexado bajo ninguna circunstancia. Otros líderes canadienses, como el Primer Ministro de Ontario, Doug Ford, destacaron la interdependencia económica entre ambos países, subrayando que Canadá proporciona el 60 % de las importaciones de energía de Estados Unidos y es el mayor proveedor extranjero de acero y aluminio.

Amenazas económicas y arancelarias

Trump también mencionó su intención de utilizar la “fuerza económica” como herramienta de presión, sugiriendo la imposición de un arancel del 25 % a productos canadienses. Ante este escenario, Canadá ya contempla medidas de represalia dirigidas a productos estadounidenses, aunque los detalles aún no han sido revelados.

“Llegaremos al extremo de cortar la energía que va hacia Michigan, hacia el estado de Nueva York y hacia Wisconsin”, amenazó el primer ministro Doug Ford, de Ontario, la mayor provincia de Canadá.

Ford advirtió que Canadá deberá usar “todas las herramientas” disponibles si Trump cumple con su amenaza de imponer un arancel del 25% a las importaciones canadienses en su primer día en el cargo.

“Los canadienses se verán afectados, pero puedo asegurarles una cosa: los estadounidenses también sentirán el dolor, y eso no es desafortunado”, declaró Ford.

Estados Unidos importó en 2024 unos 38,9 millones de megavatios/hora de electricidad, según la Administración de Información Energética de Estados Unidos (EIA, por sus isglas en inglés). La gran mayoría de eso —33,2 millones de megavatios/hora— provino de las centrales eléctricas de Canadá.

Reacciones políticas y liderazgo en Canadá

El contexto político en Canadá también enfrenta desafíos internos. El reciente anuncio de renuncia de Justin Trudeau como Primer Ministro ha dejado al país en un momento de transición, justo cuando las amenazas económicas de Trump están en su punto más álgido. Dominic LeBlanc, quien ha asumido un papel crucial en las negociaciones con la Administración entrante de Trump, reafirmó el compromiso de fortalecer la seguridad fronteriza y proteger los intereses nacionales de Canadá.

La respuesta internacional y la estabilidad regional

La Ministra de Asuntos Exteriores, Mélanie Joly, subrayó que Canadá no caerá en la provocación de Trump y reafirmó que el país cuenta con una economía sólida y una posición estratégica que respalda su independencia.

Mientras tanto, las declaraciones de Trump sobre la posibilidad de adquirir Groenlandia o el Canal de Panamá por la fuerza militar también han sido criticadas ampliamente, lo que pone de manifiesto una narrativa de tensión entre los países vecinos y los socios internacionales de Estados Unidos.

Las declaraciones de Donald Trump sobre la anexión de Canadá han intensificado las tensiones diplomáticas y económicas entre ambos países. Sin embargo, Canadá ha reafirmado su soberanía y fortaleza económica, dejando claro que, a pesar de las amenazas, mantiene su posición como un aliado clave y un socio comercial independiente. N