La Línea Amarilla, el programa de atención psicológica de emergencia que opera a través del 911, responde diariamente entre uno y dos casos de personas con ideación suicida. Hugo Nevárez Hernández, subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana, detalló que este servicio incluye una unidad móvil que acude al lugar donde se encuentra la persona en crisis para ofrecer apoyo inmediato y vincularla al sistema de salud mental.
El programa utiliza un semáforo para clasificar los casos atendidos: verde para asesorías, amarillo para ideación suicida y rojo para intentos de suicidio. De más de 1,500 personas atendidas este año, el 80 por ciento requirió contención por ideación suicida, mientras que el 20 por ciento intentó quitarse la vida. Además, el padrón de personas atendidas está parcialmente georreferenciado para facilitar el seguimiento.
La mayoría de los casos corresponden a personas de entre 14 y 35 años, en su mayoría son hombres. Nevárez Hernández indicó que, junto con el Instituto de Salud Mental, se planea implementar visitas domiciliarias para evaluar condiciones personales y dar seguimiento a los casos registrados.
En lo que va del año, 168 personas han fallecido por suicidio, lo que subraya la necesidad de fomentar la prevención y el apoyo. Se hace un llamado a la población para que busque ayuda en situaciones de depresión, angustia o ansiedad, o para reportar casos de personas en riesgo.
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