Los municipios de Aguascalientes son los responsables de aplicar esquemas de prevención y atención a los espacios conocidos como “picaderos”, donde regularmente se presentan delitos como la distribución de drogas e incluso, homicidios. En esta idea coinciden tanto los representantes de la vivienda a nivel local como la corporación de seguridad pública estatal.
En conferencia de prensa, el presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), Ignacio Flores Lugo, explicó que se han sostenido reuniones para hablar con los presidentes municipales respecto al tema, sin embargo, señaló que la responsabilidad de las viviendas abandonadas cae primeramente en las manos de los propietarios.
“Es muy importante insistir que nuestro trabajo prácticamente termina cuando le entregamos la vivienda al derechohabiente o al adquiriente, ya ahí la responsabilidad que tome el dueño o el inquilino ya es cuestión de ellos, pero buscamos siempre buscar este tipo de condiciones de habitabilidad”.
Por su parte, el delegado del Infonavit en Aguascalientes, Sergio González Serna, apuntó que 2 de cada 3 viviendas abandonadas en la entidad siguen pagándose por parte de los adquirientes, por lo que el instituto no puede intervenir en la calidad en la que se encuentra cada inmueble, ni mucho menos puede enfrentase a los inquilinos.
“Hemos trabajado en Infonavit directamente con los alcaldes de Jesús María y de San Francisco de los Romo, hemos compartido información, nos hemos sentado en mesas para ver este tema en repetidas ocasiones, ahí insistimos en el tema de la seguridad pública”.
El funcionario agregó que en los últimos años, se ha disminuido el número de viviendas abandonadas o vandalizadas en Aguascalientes, llegando a un total de 1,900 en la actualidad.
Picaderos, relacionados con drogas y homicidios
En otro momento, el secretario de Seguridad Pública del Estado, Manuel Alonso García, reconoció que las viviendas abandonadas, comúnmente conocidas como “picaderos”, suelen ser escenarios de delitos como la venta o consumo de drogas, e incluso de homicidios.
A pesar de este riesgo, explicó que los involucrados no presentan denuncias ante las autoridades, a fin de no ser detenidos por otros ilícitos.
“En muchos casos, por el mismo esquema, nunca denuncian un tema de amenazas de forma preventiva, y el fenómeno que se ha identificado es que estas personas se cambiaron de grupo en la venta (de drogas), les quedan a deber y buscan otro proveedor y entonces ya no cumplen”, dijo.
En el mismo sentido, apuntó que los ayuntamientos deben trabajar por aplicar las acciones pertinentes para evitar el uso de viviendas abandonadas como puntos criminales.
Agregó que la corporación seguirá trabajando de la mano con la fiscalía general para que estos crímenes no queden impunes.