El presidente Andrés Manuel López Obrador acudirá este miércoles a Washington a una esperada y criticada reunión con su homólogo estadounidense, Donald Trump, por la entrada en vigor del nuevo tratado comercial para América del Norte, el T-MEC.
Se trata la primera visita al extranjero del mandatario mexicano desde que asumió su cargo hace 18 meses, y la primera reunión diplomática de Trump tras el confinamiento por la pandemia de coronavirus, que coincide con su campaña de reelección.
Estados Unidos tiene una larga tradición de reuniones con mandatarios y contempla diferentes tipos de visitas diplomáticas, cuya organización puede cambiar según la administración y el gusto de los gobernantes, explica la embajadora y jefa de la Oficina de Protocolo de 1997 a 2001, Mary Mel French en su libro United States Protocol: The Guide to Official Diplomatic Etiquette.
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Las visitas de estado, como la que hizo en abril del 2018 el presidente francés, Emmanuel Macron, requieren tiempo de organización, “están marcadas con el más alto nivel de formalidad”, contemplan que los líderes de estado se queden en la Casa Blair durante tres o cuatro días, además de ceremonias multitudinarias.
“Una visita de estado consiste en una ceremonia de recibida con todos los honores en el Jardín Sur de la Casa Blanca, incluido un saludo de 21 disparos, una reunión con el presidente, un almuerzo en el Departamento de Estado y una comida de estado en la Casa Blanca”, detalla el libro.
Durante el primer día de la visita de Estado de Macron el 23 de abril del 2018, por ejemplo, ambos mandatarios acompañados de sus parejas, Brigitte y Melania, plantaron un árbol en Jardín Sur, un regalo del presidente francés, para honrar a los muertos en la Primera Guerra Mundial. También, hicieron un recorrido de monumentos históricos en Washington.
Foto: AFP/Archivo
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Al día siguiente, los mandatarios y sus comitivas acudieron a la ceremonia de bienvenida, donde 500 miembros de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos realizaron la “Revisión de las Tropas” en la ceremonia de bienvenida y posteriormente participaron en la cena de estado.
En cambio, una visita oficial de trabajo, como a la que acudirá López Obrador según la cancillería mexicana, consiste en cambio en una reunión presidencial para abordar pláticas sobre temas importantes para ambas naciones. Normalmente estas visitas duran de uno a dos días, explica French, y pueden incluir almuerzo o comida.
La gran mayoría de las visitas de líderes mundiales a Estados Unidos están marcadas como visitas oficiales de trabajo, según información del Departamento de Estado.
Si bien en estas reuniones el invitado y su comitiva también pueden ocupar la Casa Blair, ubicada frente a la Casa Blanca, el embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau, informó que el presidente mexicano López Obrador no se quedará ahí dado que “desafortunadamente en este momento está bajo restauración” aunque dijo que se le ofrecerá hospedaje.
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El viaje de López Obrador está programado para este martes después del mediodía en un vuelo comercial. Se espera que arribe por la noche a Washington y que vuelva el jueves por la mañana.
De acuerdo con la agenda que compartió la Cancillería mexicana, el mandatario acudirá el miércoles por la mañana a los monumentos de Abraham Lincoln y el de Benito Juárez, en donde“depositará sendas ofrendas”.
Por la tarde se trasladará a la Casa Blanca, en donde “después de los saludos protocolarios, presentación de comitivas y firma del Libro de Invitados, sostendrá un encuentro privado con su homólogo estadounidense”.
Después del encuentro se celebrará una segunda reunión entre ambos mandatarios con sus respectivas comitivas. Posteriormente habrá una cena ofrecida por Trump al presidente López Obrador, a su comitiva y a un grupo de empresarios de ambos países.
La Casa Blanca no ha compartido detalles sobre el protocolo del encuentro, pero dijo el el lunes en un comunicado que la reunión busca reconocer “el histórico Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (USMCA) que entró en vigor el 1 de julio de 2020″.
