El zoológico de Krefeld, en el noroeste de Alemania, ha reabierto este viernes sus puertas, dos días después del devastador incendio en el recinto de los monos que se cobró las vidas de una treintena de animales.
Varios visitantes guardaban cola antes de que el zoo reabriera a las 09:00 de la mañana (tiempo local) mientras encendían velas delante de la entrada del zoológico, en señal de tristeza y consternación.
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El incendio ocurrido en la madrugada de Año Nuevo causó la muerte de más de 30 animales, entre ellos varios primates. La guarida de los monos resultó destruida y todavía corre peligro de derrumbarse.
De acuerdo con la Policía, el incendio fue provocado por unos globos de cantoya que tres mujeres lanzaron al cielo. El fuego no fue intencionado, pero los daños causados ascienden a millones de euros.
Las mujeres se han entregado a la Policía.
Tras el devastador incendio, el zoológico de Rostock también ofreció su ayuda. “Veremos hasta qué punto podemos ayudar en la cría de animales, por ejemplo, de los orangutanes”, ha declarado Udo Nagel, director de dicho zoológico, al diario regional ‘Ostsee-Zeitung’.
Según el zoológico de Krefeld, inmediatamente después del incendio, ciudadanos de la localidad y del resto del país entregaron miles de donaciones. Entre otros, el zoológico de Karlsruhe hizo llegar sus condolencias. En este parque hubo también un incendio hace casi diez años en el que murieron numerosos animales.
