La falta de subsidios para las Estancias Infantiles, así como la nula emisión de reglas de operación que definan las normas de trabajo de estos centros, motivó la deserción del 30 por ciento de los niños matriculados en Oaxaca.
Representantes de estas instituciones advirtieron que en solo mes y medio unas 30 guarderías han cerrado sus puertas y alrededor de dos mil beneficiarios dejaron de acudir a estas instituciones, ante la falta de recursos de sus familias para cubrir la totalidad de los costos.
En conferencia de prensa, las responsables de las estancias Caracoles ubicada en Etla, Claudia Jacobo Rodríguez; Karitas de la ciudad de Oaxaca, Karina Burgoa; Luz de mi Vida, de San Antonio de la Cal, Claudia Becerril y Chispitas, de Santa Rosa Panzacola, Artemia Zorrilla Cuevas, se deslindaron de pertenecer a un partido político u organización civil.
“Si bien hemos recibido apoyo de algún organismo, eso no quiere decir que pertenezcamos al mismo”, sostuvieron.
Abundaron que en Oaxaca la agrupación que representan tiene conocimiento de 210 Estancias, mientras que en el padrón de la entonces Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) ahora Bienestar –hasta diciembre del año pasado– tenía registro de 240, en las cuales se atendían a siete mil 230 niños.
Indicaron que el servicio está dirigido a los sectores más vulnerables, de ahí que el 30 por ciento de la población infantil que atendían se haya ido, ante la falta del recurso, mientras que el 70 por ciento restante se mantiene en tanto son publicadas las reglas de operación y se establecen los nuevos mecanismos de trabajo.
Refirieron que cada Estancia establecía su cuota de corresponsabilidad, que fluctuaba desde cero pesos hasta los 800 –que era el máximo permitido–, teniendo un estándar de 650 pesos. Mientras que el subsidio federal era de 950 pesos por niño, y mil 800 para niños con discapacidad.
De ahí que las madres de familia no puedan pagar la totalidad de los servicios, esto pese a las estrategias de tequio, pagos en abonos, disminución al mínimo de la colegiatura que han implementado las propietarias de estas Estancias.
De continuar con la falta de recursos para este programa, o bien, la disminución del presupuesto a 800 pesos y otorgárselo de manera directa a los responsables de los niños, advirtieron, se podrían llegar a cerrar hasta el 40 por ciento de las Estancias en la entidad, lo que implica no solamente que miles de niños se queden sin un lugar seguro para su cuidado, sino pérdida de empleos de las madres de familia y las trabajadoras de etas guarderías.
