Las tomas clandestinas de gasolina en Oaxaca se incrementaron en un 240 por ciento entre enero y agosto de este año, en comparación con el mismo periodo pero de 2017, de acuerdo a los reportes efectuados por Petróleos Mexicanos (Pemex).
Y es que, mientras en los primeros ocho meses del año anterior la empresa documentó 25 casos de ordeña de ductos, en lo que va de este 2018, tiene registro de 80 casos en ese mismo lapso de tiempo, lo que inclusive ya superó la totalidad de lo registrado el año pasado que fue de 69.
El momento más álgido –hasta el momento—registrado en la entidad por esta actividad ilícita, tuvo lugar el pasado 29 de junio, cuando tres personas perdieron la vida –entre ellas, el policía Daniel Hernández Sánchez y dos civiles implicados en el robo y venta de hidrocarburo–, durante un enfrentamiento en la región del Istmo de Tehuantepec.
El 20 de marzo, una toma clandestina del poliducto Salina Cruz- Minatitlán Asunción, localizada en Asunción Ixtaltepec provocó derrame de combustible y fue necesaria la intervención de personal de Pemex para evitar mayores daños, sin embargo, los trabajadores tardaron tiempo en ingresar, debido a que la población se los impedía.
Otro incidente ocurrió en febrero de este año, cuando se registró una fuga de amoniaco en los ductos de gas ubicados en San Juan Guichicovi, el cual estuvo relacionado también con sustracción ilegal de combustible.
De acuerdo a los reportes mensuales de la Policía Estatal, entre enero y septiembre de este año, la institución ha decomisado 286 mil 238 litros de combustible, además de haber localizado seis tomas clandestinas en municipios de la región del Istmo de Tehuantepec.
El mes en que la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) registró el mayor aseguramiento de combustible fue marzo, con un total de 82 mil 370 litros, seguido por febrero con 59 mil 994; enero con 45 mil 900; agosto con 41 mil 220; julio con 20 mil 400 litros; abril con 18 mil 40 litros; septiembre con nueve mil 804; junio con seis mil 910 y mayo con mil 600 litros.