En Oaxaca cada año se registran alrededor de mil embarazos en menores de 15 años, lo que representa un problema de salud pública en el estado y tiene causas multifactoriales, entre ellas el abuso sexual, indicó el responsable estatal de Planificación Familiar de los Servicios de Salud (SSO), Jorge Iván Galindo Santiago.
En entrevista, detalló que la institución documenta anualmente una incidencia del 20 por ciento de los eventos obstétricos en adolescentes de entre 12 y 19 años. Tan solo en 2017, las unidades médicas de los SSO atendieron seis mil 735 embarazos en este sector poblacional, de los cuales mil fueron en menores de 15 años.
Indicó que México ocupa los primeros lugares en todo el mundo en embarazos adolescentes, y aunque se ha reducido la natalidad de la población en general para llegar a 2.3 hijos por familia, la problemática en la materia continúa.
Ante ello, refirió, la Secretaría de Salud en el ámbito federal implementó la Estrategia Nacional para la Prevención de Embarazos en Adolescentes, de la cual forman parte todas las instituciones del sector.
El objetivo, sostuvo, consiste en erradicar los embarazos en menores de 15 años, mediante una estrategia conjunta, pero resaltó, el problema es multidisciplinario, por lo que se requiere la participación también del ámbito educativo y familiar.
Los embarazos en este grupo representan un riesgo, aseguró, debido a que existe la posibilidad de que la adolescente enfrente desnutrición infantil, in útero, complicaciones en el parto, entre otros problemas médicos, además de los correspondientes a la índole social, como deserción escolar, pobreza, entre otros.
Resaltó que en Oaxaca se cuentan con 205 unidades médicas que brindan “Servicios amigables” para atender a un grupo adolescente de entre 12 y 19 años de edad, a quienes se les brinda orientación sobre métodos anticonceptivos y prevención de enfermedades de transmisión sexual.
Precisó que la información es fundamental para prevenir los embarazos adolescentes, por lo que se debe proporcionar basada en evidencia científica, por lo que en caso de que los padres no se sientan con la confianza de platicar con sus hijos, pueden recibir también orientación en las unidades de salud de la dependencia.