La directora de comunicaciones del presidente Donald Trump, una de las más cercanas colaboradoras del mandatario, dimitirá a su cargo, dijo el miércoles la Casa Blanca.
La joven de 29 años, que se había sumado a la campaña del magnate inmobiliario desde el principio sin ninguna experiencia política, ocupaba el cargo desde septiembre.
“No hay una fecha definitiva pero sí puedo confirmarlo”, dijo Sanders, y destacó que la decisión de Hicks esté vinculada a su rechazo a contestar preguntas en una audiencia el martes en el Congreso sobre la posible injerencia rusa en las elecciones de 2016 que llevaron a Trump a la presidencia.
Según información de CNN, la mujer declaró por escrito que “no hay palabras para expresar adecuadamente mi gratitud al presidente Trump. Le deseo lo mejor al presidente y su administración, ya que él continúa liderando nuestro país”.
Trump aseguró en un comunicado que Hope Hicks “es sobresaliente y que ha hecho un gran trabajo en los últimos tres años”, y dijo que era una mujer “inteligente” y “gran persona”.
Hicks se limitó a contestar el martes las preguntas aprobadas anteriormente, según los miembros del comité, al igual que ya han hecho otros consejeros del círculo de Trump que han comparecido, como el exjefe de estrategia de la Casa Blanca Steve Bannon.
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Hicks evitó preguntas sobre su trabajo y los contactos de la Casa Blanca con Rusia después de las elecciones presidenciales del 8 de noviembre de 2016 y de la toma de posesión del 20 de enero de 2017, según el congresista demócrata Mike Quigley.
“Están siguiendo las órdenes de la Casa Blanca de no contestar ciertas preguntas”, aseguró Quigley a los periodistas.
El comité ha realizado varias audiencias sobre la posible interferencia rusa en las elecciones y los vínculos entre la campaña de Trump y Moscú, pero no ha conseguido grandes avances debido a la lucha entre los republicanos leales al presidente y los demócratas que presionan a la Casa Blanca.
