El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este lunes órdenes ejecutivas que establecen un arancel del 25 % a las importaciones de acero y aluminio, con vigencia a partir del 12 de marzo de 2025. Según el mandatario, estas importaciones “amenazan con alterar la seguridad nacional”, justificando así la implementación inmediata de la medida.
NUEVAS MEDIDAS Y POSIBLES NUEVOS ARANCELES
Desde el Despacho Oval, Trump anunció: “Hoy simplifico nuestros aranceles sobre el acero y el aluminio. Es un 25%, sin excepciones ni exenciones”. Además, advirtió que podría extender estas tarifas a sectores clave como la industria automotriz, farmacéutica y de semiconductores.
GOLPE A LA INDUSTRIA CERVECERA EN ESTADOS UNIDOS
La imposición de estos aranceles generará repercusiones en múltiples sectores, incluida la industria cervecera, que depende en gran medida del aluminio para la fabricación de latas. Empresas como Molson Coors, conocida por marcas como Coors Light, Blue Moon y Redd’s, así como Constellation Brands, productora de Corona, Modelo y Fresca Mixed, aún no han emitido comentarios al respecto.
El aluminio ya había sido afectado por medidas similares en 2018, cuando la administración Trump impuso un arancel del 10%, encareciendo la producción de latas y generando dificultades económicas para muchas cerveceras. La nueva tarifa del 25% podría agravar la situación, aumentando los costos de producción y afectando a un mercado que aún se recupera de los efectos de la pandemia.
ASÍ PODRÍA AFECTAR A LOS CONSUMIDORES
La industria cervecera, que es una de las mayores consumidoras de aluminio, podría enfrentar aumentos significativos en los costos, lo que se traduciría en precios más altos para los consumidores. Mientras que las grandes empresas con cadenas de suministro bien establecidas podrían absorber parte de los costos adicionales, las cerveceras artesanales, con márgenes más estrechos, serían las más afectadas.
En 2018, el Beer Institute estimó que la industria cervecera asumió más de 1,4 mil millones de dólares en costos adicionales tras la aplicación de los primeros aranceles al aluminio. Esto generó una reducción en el consumo y un cambio en las preferencias de los consumidores hacia opciones más económicas o alternativas.
LOS HORIZONTES DEL SECTOR
A medida que el nuevo arancel entre en vigor, las cerveceras enfrentarán el reto de equilibrar costos y demanda. A corto plazo, es probable que los precios de producción y venta aumenten. A largo plazo, las empresas podrían explorar nuevas fuentes de materia prima, recurrir a materiales alternativos o incluso solicitar exenciones para mitigar el impacto en fabricantes y consumidores.
Con la implementación de estas medidas, el sector cervecero deberá adaptarse a un entorno económico desafiante, mientras los consumidores podrían ver reflejado el impacto en los precios de sus bebidas favoritas. N
(Con información de agencias y Newsweek Internacional)