¿Sabías que los humanos no son la única especie que se emborracha? Algunas aves también experimentan un “estado de embriaguez”. Sin embargo, en lugar de beber alcohol, estas pequeñas criaturas aladas se ven afectadas al consumir frutas y bayas fermentadas, especialmente durante el invierno, cuando sus fuentes de alimento son limitadas. Hoy te contamos sobre esa peculiaridad de los pájaros alas de cera.
Conocidos científicamente como Bombycilla, son un pequeño género de aves paseriformes (que se caracterizan por tener tres dedos dirigidos hacia delante y uno hacia atrás para poder asirse con facilidad a las ramas) de la familia Bombycillidae. Y reciben este nombre por las puntas de sus plumas, que parecen gotas de cera de color rojo, particularmente en sus alas.
Existen tres especies principales: el ampelis americano (Bombycilla cedrorum), el ampelis europeo (Bombycilla garrulus) y el ampelis japonés (Bombycilla japonica). De acuerdo con el libro La naturaleza, de la Sociedad Mexicana de Historia Natural, estas aves suelen habitar en América del Norte, Europa y Asia; prefieren zonas boscosas, donde tengan acceso a frutas.
“El ampelis americano es un ave de paso que migra al Valle de México a principios de invierno. Además, no anidan en todos los países que frecuentan. Cada individuo come una gran cantidad de frutos, aprovechando solamente la parte carnosa y arrojando en sus excrementos el epicarpio (piel del fruto o capa externa) y la semilla”, detalla la obra.
EL CONSUMO DE FRUTOS FERMENTADOS EN LOS PÁJAROS ALAS DE CERA
A tenor del sitio iNaturalist México, las pájaros alas de cera comen bayas y frutas azucaradas todo el año, así como insectos que se vuelven parte importante de la dieta durante el periodo reproductivo.
Cuando la punta de una rama tiene bayas que solo puede alcanzar un ave a la vez, los miembros de una bandada pueden alinearse sobre la ramilla y pasarse las bayas de pico en pico hasta el final de la fila de modo que cada pájaro pueda alimentarse.
Sin embargo, después del invierno, cuando las frutas se descongelan, se produce una fermentación natural que convierte los azúcares en alcohol, lo que hace que las aves se intoxiquen al ingerirlas.
En ese sentido, los síntomas de “embriaguez” pueden incluir dificultad para volar en línea recta, comportamiento desorientado e incluso caídas, causando en las personas que los ven asombro y empatía. Cuando ven a estos animalitos tirados, suelen llevarlos a lugares seguros hasta que estén “sobrios”.
En 2023, funcionarios del Departamento de Recursos Naturales de Georgia, Estados Unidos, advirtieron a los residentes sobre la posible presencia de pájaros borrachos.
“El consumo de esos frutos fermentados puede hacer que los pájaros pierdan coordinación y su capacidad de volar. Esto puede hacer que choquen contra ventanas de vidrio y otros obstáculos. Tristemente, pueden también morir por envenenamiento con alcohol si consumen una cierta cantidad de frutos fermentados”, informó entonces el Departamento.
No obstante, según la misma fuente, otra posible causa de embriaguez en los pájaros alas de cera es el consumo de los frutos de la Nandina doméstica (conocida también como bambú sagrado). Esta planta exótica puede extraer cianuro del suelo, depositando frecuentemente dosis letales en sus frutos de color rojo brillante. N
