En el marco de la conmemoración del Día Mundial de las Personas Refugiadas, el titular de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) en Baja California, Efrén González Pola, dio a conocer que en los últimos 11 años se han recibido poco más del medio millón de solicitudes de refugio en México, las personas solicitantes provienen principalmente de Honduras, Venezuela y El Salvador.
De 2013 a mayo de 2024, se han registrado 596, 642 personas solicitantes de refugio entre hombres, mujeres e infantes. De ese total, el gobierno mexicano expidió 190, 081 resoluciones, de las que 125, 232 fueron positivas; 11, 701 personas recibieron una resolución complementaria; y 53, 148 obtuvo una resolución negativa. El resto abandonó el proceso de solicitud, ya sea porque volvió a su país de origen o logró ingresar a Estados Unidos.
González Pola compartió que el 83 por ciento de las resoluciones positivas corresponden a personas migrantes de Honduras, Venezuela y El Salvador.
Quienes obtuvieron una resolución complementaria es porque se demostró que si vuelven a su país tienen el riesgo de perder la vida o ser sujetas a tortura y vejaciones de lesa humanidad. El 93.3 por ciento de estas resoluciones corresponden a personas originarias de Haití, Honduras, El Salvador, Cuba, Nicaragua y Guatemala.
Quienes no alcanzaron una resolución positiva y su trámite fue negado, tienen la posibilidad de recurrir a otros medios de defensa legal ante el Tribunal Superior Administrativo o ante la COMAR donde se analiza nuevamente su caso, de obtener una nueva negativa es cuando se procede a su deportación, a menos que en el transcurso del tiempo se hayan casado con una persona mexicana; hayan procreado en territorio mexicano; o son candidatos para algún programa de regularización por parte del Instituto Nacional de Migración (INM).
A nivel local, de 2019 a mayo de 2024, dijo que en Baja California se han tramitado cerca de 14, 418, siendo los mismos países solicitantes que a nivel nacional.
Katerine Sofía Girón Martínez, logró el refugio en México luego de casi tres años de iniciar el trámite. Ella llegó a México desde El Salvador, país donde nació y creció hasta los 21 años.
El contexto de violencia que se vivía en su lugar de origen la orilló a migrar junto con su familia en 2018, año en que se trasladó a Tijuana, luego de cruzar la frontera por Tapachula, Chiapas. Durante el trayecto le tocó vivir experiencias de inseguridad hasta llegar a esta ciudad fronteriza.
Desde su llegada logró integrarse trabajando en organizaciones de la sociedad civil como Espacio Migrante y en la actualidad con la organización Al Otro Lado, dedicadas al apoyo de personas en contexto de movilidad. Su petición a las autoridades mexicanas es que se trabaje en la educación a la sociedad para disminuir el estigma que existe en contra de la comunidad migrante de Centro y Sudamérica. N