La octava tormenta invernal y el frente frío número 24 trajeron consigo un descenso drástico de las temperaturas y fuertes ráfagas de viento en diversos municipios del norte y sureste de Durango.
El pasado lunes, se registraron vientos de 90 a 110 kilómetros por hora, en la mayor parte del territorio estatal, causando la caída de espectaculares, árboles y ramas en municipios como Pueblo Nuevo y Durango capital. De acuerdo con el reporte de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC) no se registraron daños graves ni personas lesionadas por estos incidentes, los cuales, fueron atendidos por las coordinaciones municipales.
Debido a que se mantiene el pronóstico de intensas rachas de viento, la recomendación a la ciudadanía es asegurar puertas, ventanas y toldos, además retirar macetas y otros objetos que puedan caer a la calle y provocar accidentes. También se pide mantenerse alejados de cornisas, arboles, espectaculares y construcciones que se encuentren en mal estado, ante riesgo de caída. De igual forma, se invita a la población a estar informada a través de fuentes oficiales y tomar precauciones adicionales mientras persistan las condiciones adversas.
Aunque la Comisión Nacional de Agua (Conagua) había pronosticado la posibilidad de nieve o aguanieve en Tepehuanes y Guanaceví, estos municipios únicamente experimentaron temperaturas bajo cero.
La Coordinación Estatal de Protección Civil informó que se espera una disminución gradual de los vientos y una mejora en las temperaturas durante las próximas horas por lo que se estima que, el próximo jueves la octava tormenta invernal se disipe por completo.
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