En la tumultuosa historia de Israel, Golda Meir se erige como símbolo de fuerza, liderazgo y determinación inquebrantable. Si bien su legado político está ampliamente documentado, una nueva representación cinematográfica busca revelar el lado más suave y humano de esta figura icónica.
En entrevista con Nicholas Martin, guionista y productor de la recientemente estrenada película sobre la mujer que fuera primera ministra de Israel, Golda, Newsweek en Español obtuvo una visión de todo el proceso para dar vida en la gran pantalla a este personaje complejo.
UN RETRATO DUAL: POLÍTICA Y ABUELA
Golda Meir, a menudo llamada la “dama de hierro” de la política israelí, es principalmente recordada por sus acciones decisivas y su liderazgo en una era turbulenta. Sin embargo, Nicholas Martin, guionista y productor de la película, explica que inicialmente se crearon varias escenas familiares para representar la vida privada de Meir con sus nietos.
Lamentablemente, estas escenas fueron finalmente omitidas debido a restricciones de tiempo. “Había escrito varias escenas familiares con sus nietos, y desafortunadamente todas quedaron en la sala de edición porque la película habría sido demasiado larga”, cuenta.
La decisión de centrarse en su vida política y desde ahí transmitir su humanidad fue deliberada. Meir era una mujer de muchas facetas, y Nicholas Martin destaca una historia conmovedora que influyó en su enfoque.
“Tengo un amigo en Israel que, justo antes de que comenzara la guerra, era parte de la Armada, un Navy Seal. Él solía partir con sus camaradas en un bote hacia Siria y Egipto, donde llevaban a cabo misiones terribles en las que tenían que enfrentarse y matar a personas. Y él me contó: ‘Bueno, teníamos nuestro bote en el puerto, y un día el coche de la primera ministra se detuvo y Golda se bajó. Se acercó a nuestro bote y nos dio un termo con sopa y algunos sándwiches que ella misma había preparado. Y nos decía: ‘Estarán bien, estarán lo suficientemente abrigados, tengan mucho cuidado’. Y actuaba como una abuela’”.

EL COMPROMISO DE GOLDA MEIR CON LA PAZ
Si bien Golda Meir era conocida por tomar decisiones difíciles que involucraban violencia, es crucial reconocer que no disfrutaba de estas acciones. Nicholas Martin sugiere que sentía una profunda aversión por la violencia y la guerra y que deseaba la paz no solo para Israel, sino también para sus naciones vecinas.
Su legado perdurable en Oriente Medio es la paz duradera entre Israel y Egipto, un testimonio de su compromiso inquebrantable con la estabilidad regional. “Creo que nunca perdió su humanidad y vio una cantidad enorme de violencia durante años, pero odiaba absolutamente la violencia y la guerra. Y lo que más deseaba era la paz”.
SACRIFICIO PERSONAL POR LA NACIÓN
La dedicación de Golda Meir a su nación a menudo tuvo un costo en su vida personal. Nicholas Martin pinta el retrato de una mujer que ponía a Israel por encima de todo, a veces en detrimento de su vida familiar. Su esposo e hijos ocasionalmente sentían su ausencia, y su decisión de convertirse en primera ministra a fines de los años 1970 se basó en un sentido del deber más que en un deseo personal.
“Creo que realmente habría preferido pasar ese tiempo con su familia, pero el país estaba en un estado tan caótico que sentía que tenía que cumplir con su deber”, considera el cineasta.
EL PROCESO DE INVESTIGACIÓN
Crear una película sobre una figura histórica tan significativa como Golda Meir requirió una extensa investigación. Nicholas Martin realizó múltiples viajes a Israel y se reunió con personas que tuvieron experiencias de primera mano con ella durante el período crítico representado en la película.
Notablemente, tuvo el privilegio de conversar con el exjefe del Mossad —agencia de inteligencia de Israel—, quien desempeñó un papel fundamental al advertir sobre la inminente guerra. “Hablé con él hace cinco años; tenía 94 en ese momento, y nos reunimos varias veces. Fue realmente una experiencia increíble, y él me explicó la antesala de la guerra y su relación con Golda”.
LA COMPLEJIDAD DE LA HISTORIA DE GOLDA MEIR
Representar el contexto histórico y político intrincado de la época en una película de dos horas presentó un desafío formidable. Nicholas Martin reconoce que la narrativa es más complicada de lo que aparece en la pantalla. “Es mucho más enredado de lo que incluso he presentado en la pantalla, y comprimir estos meses de acción en dos horas nuevamente es muy difícil”.
Golda, película que actualmente se encuentra en salas de cine en todo México, ofrece una perspectiva única sobre la vida de una mujer que moldeó el destino de una nación. Más allá de su papel como gigante político, la humanidad de Golda Meir brilla, recordándonos que, incluso en los momentos más desafiantes, la compasión y la dedicación pueden coexistir con la fuerza y la determinación.
La película, como lo discute Nicholas Martin, invita a los espectadores a explorar la naturaleza multifacética de esta notable lideresa, cuyo legado perdura como testimonio de la búsqueda constante de la paz y los sacrificios realizados en aras de una nación. N