¿Cuántas bacterias hay en un asiento del metro? ¿Y qué tal en tu billetera? ¿O en el hocico de tu perro? La tiktokera @the_lab_life1 ha tratado de responder todas esas interrogantes. Después de examinar objetos cotidianos y desarrollar cultivos de las muestras obtenidas, la científica crea videos con los que sus seguidores pueden asomarse al mundo oculto de los microbios que nos rodean.
Mejor conocida como @the_lab_life1 —aunque sus amigos la llaman CM—, la autora de tiktoks virales estudia una maestría en la Universidad de Toronto. Explica a Newsweek la motivación de sus publicaciones: “Mi especialidad es la microbiología y, en estos momentos, estoy estudiando el microbioma de la leche materna y sus impactos en la salud infantil. En otras palabras, lo que estudio son las bacterias que puede haber en la leche materna y trato de asociarlas con el desarrollo de microbiomas infantiles saludables”.
Cuando CM trabajaba como asistente de investigación en el laboratorio de la universidad, decidió hacer videos de los momentos graciosos del día a día, los cuales compartía con amigos y colegas. “La verdad, nunca imaginé que alguien más los vería”, confiesa la científica.
@the_lab_life1 Sina’s neck is clean ! #fyp #foryoupage
Las cosas cambiaron en octubre de 2022, cuando CM compartió un video de las distintas bacterias que logró desarrollar a partir de un frotis de la piel de un colega de laboratorio.
“No sé cómo, pero ese video se viralizó casi de inmediato, cosa que me sorprendió un poco”, recuerda CM. “Recibí una andanada de comentarios de personas diciendo que mis contenidos les parecían interesantes y chistosos, y eso me entusiasmó muchísimo”.
SU PÚBLICO CRECE COMO LAS BACTERIAS
Aquel video recibió más de 3.1 millones de visitas y, desde entonces, además de sus contenidos habituales, CM ha publicado una serie de videos titulados “…lo que crece”. Igual que las bacterias, su público ha proliferado, y los videos más recientes de la serie han recibido más de 20 millones de visualizaciones.
“Me di cuenta de que había mucha gente que, como yo, tenía un interés natural en ver lo que resulta invisible a los ojos humanos, así que pensé: ‘¿Por qué no tratas de mostrarles eso?’”, prosigue CM. “Y dado que antes me consideraba medio ‘germofóbica, el trabajo con estos videos me ha ayudado a superar un poco ese temor.
“Todo, absolutamente todo, posee un microbioma, y he aprendido a aceptar esa realidad. Imagino el microbioma como una ciudad donde las bacterias pasan su vida. Solo que la ciudad está sobre un objeto, como una manzana”, explica la estudiante de maestría.
Aquí es importante señalar que no todas las bacterias son dañinas y que, de hecho, algunas son esenciales para la salud. “La serie ‘…lo que crece’ no pretende asustar a mis seguidores, pues casi todos los cultivos están formados por bacterias amigables con las que nos topamos habitualmente, y que un sistema inmunológico sano puede eliminar sin el menor problema”, informa CM.
Para producir esas “metrópolis microscópicas”, la bióloga obtiene y cultiva bacterias siguiendo un protocolo estándar: “Después de que froto el objeto con un aplicador de algodón estéril, arrastro el extremo de algodón sobre una placa de agar nutritivo que favorece el crecimiento bacteriano”, detalla.
RESULTADOS MUY SORPRENDENTES
“Lo que hago se conoce como siembra por estría, y consiste en frotar el aplicador contra el agar para crear un diseño de líneas cruzadas, tratando de abarcar toda la placa. Después pongo la placa de cultivo en una incubadora, la cual se mantiene a una temperatura específica para propiciar el desarrollo bacteriano. En general, la placa debe permanecer allí entre 24 y 48 horas, para luego retirarla y observar si las bacterias se desarrollaron o no”.
Algunos resultados han sido muy sorprendentes. “Muchas veces tengo una idea aproximada del tipo de bacterias que voy a sembrar, así que casi siempre puedo anticipar lo que va a desarrollarse en la superficie de agar. Sin embargo, el cultivo del asiento del metro fue un descubrimiento impactante”, revela CM. “Pensé que obtendría una gran variedad de bacterias, incluso algunas patógenas, de modo que me sorprendió gratamente que el desarrollo de la placa fuera casi nulo”.
La bióloga añade que, aunque las condiciones requeridas para la siembra por estría no son adecuadas para todo tipo de bacterias, sus experimentos dan una idea aproximada de los microbios que podrían estar presentes en una superficie particular.
CM agrega que, como microbióloga y tratándose de bacterias, ya nada le causa asco. Pese a ello, detalla para Newsweek los cinco descubrimientos más repugnantes.
1. EL ZAPATO DE UNA COLEGA DE LABORATORIO
“Como trabaja en una clínica dental, sabía que mi colega se pasaba el día pisando infinidad de organismos diferentes. Aun así, obtuve una placa que me resultó asquerosa”.
2. EL HOCICO DEL PERRO DE SU NOVIO
“Uno de los cultivos que podría competir por el premio de asquerosidad fue el frotis del hocico del perro de mi novio. Es un animal adorable, ciertamente, pero su aliento es bastante desagradable, así que sabía que las bacterias que produciría la placa serían igual de malolientes. Espero que nadie esté comiendo mientras lee esto”.
3. LA BILLETERA DE SU JEFE
“Me sorprendí muchísimo con la cantidad de bacterias que se desarrollaron con el frotis de la billetera de mi jefe. El crecimiento bacteriano fue muy abundante, denso y tenía mucho relieve”.
@the_lab_life1 A special thanks to Ziggy, Drama, and Rafiki! #fyp #foryoupage #lab #science
4. UNA FUENTE
“Si bien no me pareció asqueroso, ese cultivo produjo montones de bacterias. Aunque era de esperar, por supuesto, porque las condiciones húmedas de una fuente propician el desarrollo de bacterias”.
5. UN SANITARIO PÚBLICO
“Tomar una muestra de un inodoro público es, de por sí, bastante asqueroso. De modo que no fue mi experiencia favorita. Ahora bien, tomando en cuenta que la muestra procedía de un inodoro, las bacterias que obtuve no fueron tan asquerosas como esperaba. Eso sí, la placa desarrolló un montón de bacterias distintas, y ese tipo de resultado siempre es muy divertido, porque puedes apreciar sus diferentes colores y formas”.
VIDEOS CON FELICIDAD
CM asegura que la respuesta a su canal ha sido de lo más positiva. “Me encanta interactuar con otros fanáticos de la ciencia, y ‘charlar’ con los padres de los niños que siguen mis publicaciones. Me hace feliz saber que mis videos no solo son educativos, sino que también dan felicidad a muchas personas”.
“Espero que la gente termine por darse cuenta de que la ciencia es divertida y apasionante. Y también quiero demostrar a los estudiantes dedicados que las oportunidades para estudiar una carrera en ciencias o trabajar en el mundo científico son muchas y muy variadas”, concluye la microbióloga. N
(Publicado en cooperación con Newsweek. Published in cooperation with Newsweek).