Sin alcanzar todavía un acuerdo unánime, los 12 miembros del jurado que sellarán el destino del exsecretario de Seguridad Pública de México, Genaro García Luna, acusado de ayudar al Cártel de Sinaloa a enviar 53 toneladas de cocaína a Estados Unidos, proseguirán sus deliberaciones el próximo martes 21 de febrero, anunció el juez Brian Cogan este viernes.
El jurado “terminó por hoy sus deliberaciones y volverá el martes a las 09:00 horas (14:00 GMT)”, anunció el juez, que les pidió que a lo largo del largo fin de semana —el lunes es festivo en Estados Unidos— se mantengan alejados de internet y de las redes sociales y no hablen del caso con nadie.
Integrado por siete mujeres y cinco hombres, el jurado, que empezó sus deliberaciones el jueves por la tarde, se mantuvo todo el día encerrado en una sala del tribunal de Brooklyn. Desde la víspera, solicitaron al juez las transcripciones de las declaraciones de una docena de testigos, una señal de que les llevará tiempo analizar el caso del funcionario mexicano de mayor rango que se enfrenta a la justicia estadounidense.
Aunque en los últimos días han aparecido sonrientes en el tribunal, el nerviosismo reinaba en la esposa Cristina Pereyra, quien ha estado cada día en el juicio, y su hija Luna Sofía. A la salida del juzgado, una docena de personas increparon a Pereyra y la defensa de García Luna.
GARCÍA LUNA SE TRASLADÓ A VIVIR A FLORIDA EN 2012
La justicia estadounidense acusa a García Luna, de 54 años, de cinco cargos, cuatro de ellos relacionados con el tráfico de droga y otro de mentir a las autoridades migratorias cuando solicitó su nacionalidad estadounidense en 2018. Si es declarado culpable, se enfrentará a entre 20 años de cárcel y cadena perpetua.
Tras casi cuatro semanas de juicio —la mitad de lo previsto inicialmente—, han desfilado a petición de la fiscalía más de dos docenas de testigos, algunos prominentes miembros del cartel de Joaquín “El Chapo” Guzmán (condenado a cadena perpetua en Estados Unidos).
Algunos declararon haber hecho pagos millonarios o tener conocimiento al que fuera director de la extinta Agencia Federal de Inteligencia (AFI), y zar antidrogas en la guerra contra el narcotráfico que libró el sexenio de Felipe Calderón (2006-2012), a cambio de información y protección.
Según la fiscalía, el acusado fue “socio criminal” del Cártel de Sinaloa, sin cuya colaboración le hubiera resultado “imposible” realizar la “operación multimillonaria” de tráfico de droga procedente de Sudamérica y con destino al mercado estadounidense.
En diciembre de 2019, se detuvo a García Luna en Dallas, Texas, quien también se trasladó a vivir a Florida en diciembre de 2012. Lugar donde tendría al menos 39 empresas a su nombre o el de sus allegados, según la cancillería mexicana. N
(Con información de AFP)
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