A poco más de un mes de que se entregue el Premio Nacional del Deporte 2021, evoca hasta los recuerdos del deporte nacional el galardón otorgado en 1975, a quien fuera uno de los máximos exponentes del tiro deportivo en México, y que no es otro, sino el también exitoso empresario Olegario Vázquez Raña.
Don Olegario, quien junto al clavadista Carlos Girón recibió el Premio Nacional del Deporte hace 46 años, consagró aquel premio con una medalla aurea durante su participación en los Juegos Panamericanos de 1975, cuya sede fue la Ciudad de México.
Quien hubiera pensado que aquella destreza e inigualables cualidades como tirador, años más tarde se convertirían en las herramientas para formar una sólida carrera como empresario, teniendo una puntería igual de efectiva pero ahora en los negocios.
Como atleta, Olegario Vázquez Raña inició sus andanzas en el tiro en 1956, pero fue hasta cuatro años más tarde cuando se unió al deporte olímpico. Acumuló cuatro participaciones en Juegos Olímpicos: Tokio 1964, México 1968, Múnich 1972 y Montreal 1976, así como participaciones en Juegos Panamericanos, Juegos Centroamericanos y del Caribe, así como Campeonatos Mundiales.
Asimismo, el ahora empresario considerado por muchos como uno de los más exitosos en los últimos años, cosechó siete preseas en la historia de las competencias continentales, por otras tantas más en diversas competencias mundiales y regionales, así como un par de récords mundiales y plusmarcas tanto nacionales como panamericanas; no obstante, la presea olímpica siempre se le negó.
Tras su paso brillante como atleta, Don Olegario fue nombrado como miembro de la Federación Mexicana de Tiro Deportivo en 1975, y para 1992 elevó su rango a presidente honorario vitalicio; asimismo, a nivel internacional se convirtió en Miembro Permanente del Comité Olímpico Internacional desde 1969 y presidente de la Federación Internacional de Tiro (ISSF).
Cambió su puntería hacia los negocios
Olegario Vázquez Raña tuvo una destacada carrera como representante del tiro mexicano; sin embargo, como empresario labró una ruta igual de prolífica, al llevar el popular negocio familiar, la tienda de muebles Hermanos Vázquez, hasta el emporio conocido como Grupo Empresarial Ángeles, nombre dado en honor a su esposa María de los Ángeles Aldir.
Su asertividad en los negocios le permitió incursionar en Prensa, Radio, Televisión, hospitales, restaurantes, hoteles, entre otras líneas de negocio, siendo sus primeros grandes aciertos la adquisición de la cadena de hoteles Camino Real en el año 2000 y tres años más tarde la compra de Grupo Imagen.
A dichas acciones, le siguieron su visión para adquirir el diario Excélsior y el Canal 28 de televisión en 2006; fundar Grupo Financiero Multiva; adquirir los hoteles Quinta Real; lanzar la marca de hoteles Real Inn; comprar el equipo de futbol Gallos de Querétaro y ganar la licitación de una nueva cadena de televisión abierta en 2015.
Como deportista y empresario sus logros son únicos e inigualables; por lo que, Don Olegario se constituye como un digno ejemplo de esfuerzo y superación.
Por lo pronto, ha dejado en manos de su hijo Olegario Vázquez Aldir su legado, al tiempo que aguarda por presenciar la consecución de una medalla olímpica para México en tiro deportivo, presea que durante cuatro ediciones de Juegos Olímpicos se le negó como atleta de alto rendimiento.
*BC