Un estudio muestra una conexión entre el covid-19 y una disminución en las capacidades de razonamiento y resolución de problemas.
UN ESTUDIO del Reino Unido presentado recientemente halla una conexión entre quienes contrajeron el covid-19 y una disminución en sus capacidades de razonamiento y resolución de problemas.
El estudio, publicado en julio en la revista The Lancet, examinó a personas que respondieron el Gran Examen Británico de Inteligencia (GBTI). La prueba mide diferentes tipos de capacidades mentales humanas. Entre las 81,337 personas que la respondieron, entre enero y diciembre de 2020, 12,689 dijeron que habían contraído el covid-19.
Al usar la información de los 81,337 examinados, los investigadores primero determinaron el promedio de calificaciones del examen para personas de diferentes sexos, orígenes étnicos, idiomas natales, países de residencia, estatus laborales e ingresos. Luego los compararon con los promedios de las calificaciones reales de quienes sí y quienes no habían contraído el covid-19. De los examinados, 12,689 habían contraído el covid-19.
La comparación halló que quienes habían contraído el covid-19 habían tenido peores resultados en diferentes partes del GBIT en comparación con quienes no lo habían contraído. Las personas que contrajeron el covid-19 tuvieron peores resultados en las partes del examen que involucraban razonamiento, resolución de problemas, planeación espacial y detección de objetivos, reportó CTV News.
No te pierdas: ¿Qué hacer con la variante Delta?
Las personas que contrajeron el covid-19 también tuvieron peores resultados si habían sufrido síntomas virales más graves. Por ejemplo, quienes habían sido puestos en ventiladores tuvieron el mayor déficit cognitivo, comparable a una disminución de siete puntos en el coeficiente intelectual (CI), dijo el estudio.
“Estos resultados concuerdan con los reportes del covid-10 largo, donde la ‘niebla mental’, problemas para concentrarse y dificultad para hallar las palabras correctas son comunes”, escribieron los investigadores. “La recuperación de la infección del covid-19 podría estar asociada con problemas especialmente pronunciados en aspectos de la función cognitiva o ‘ejecutiva’ más alta”.
Los investigadores también dijeron que dicho déficit cognitivo puede continuar mucho después de que una persona deje de padecer otros síntomas del covid-19. el déficit puede durar semanas o meses después de una persona contrae inicialmente el virus.
Sin embargo, los científicos añadieron que se necesitaba más investigación que implicara información de escaneo cerebral. Solo entonces los investigadores pueden determinar apropiadamente si el covid-19 provoca cambios neurobiológicos o psicológicos que afecten la inteligencia.
El equipo de investigadores del estudio incluía a académicos del Colegio Imperial de Londres, el Colegio del Rey y las universidades de Cambridge, Southampton y Chicago.
También lee: Dudas, mitos, realidades: el estatus del covid-19
Se ha descubierto que el covid-19 tiene síntomas potenciales de largo plazo. Algunos de esos síntomas incluyen fatiga, dolor de articulaciones, jaqueca, pérdida del olfato o el gusto, fiebre y mareo al pararse, dijo la Clínica Mayo.
Las pruebas de escaneo también han revelado que el covid-19 puede dañar el corazón, los pulmones y el cerebro de los sobrevivientes. El daño al músculo cardiaco puede provocar dolores de pecho, aumento del ritmo cardiaco y otros problemas similares más tarde en la vida. La afectación por el virus en los diminutos sacos de aire en los pulmones puede generar dificultad para respirar u otros problemas respiratorios.
El covid-19 posiblemente también puede provocar apoplejía, convulsiones y una posibilidad aumentada de desarrollar las enfermedades de Parkinson, Alzheimer y el síndrome de Guillain-Barre, un padecimiento que provoca parálisis temporal, reportó la clínica.
Alguien que haya padecido síntomas graves también puede desarrollar problemas para dormir, depresión o ansiedad, sobre todo si sufrió de mucho estrés durante su enfermedad, concluyó la Clínica Mayo.
—∞—
Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek