Con casi todo el país en verde y amarillo, el Día de las Madres promete una significativa recuperación para restaurantes, florerías, grandes tiendas departamentales y todas las que ofrecen regalos, plazas comerciales, algunos sitios vacacionales y centros de abastos como mercados populares y supermercados.
Como si se hubieran puesto de acuerdo autoridades de salud federales y estatales, coinciden para este día en que 29 estados de la República relajen las medidas sanitarias al colocarse 15 en amarillo y 14 en verde, de acuerdo al semáforo epidemiológico.
El año pasado la celebración de las madres fue un fracaso económico.
12 meses después, la vacunación de adultos mayores de 60 años, algunos maestros, personal médico y muy poquitos que van de los 50 a los 59 años, parece que dan una sensación superficial de seguridad y confianza y la gente se olvida de las medidas sanitarias.
Sin embargo, con semáforo amarillo todavía hay restricciones, no se permite aforo total en restaurantes y hoteles, pueden ir poco más del 70%, pero en la mayor parte de los sitios no se respeta. En Yucatán hasta las 10:30 de la noche pueden estar abiertos, y aunque Quintana Roo está en naranja y solamente 30% podrían acudir a sitios cerrados, nunca han respetado las indicaciones de salud para beneficiar al turismo, el resultado es que tiene alta tasa de contagiados.
Los gobiernos tanto el federal como los estatales, polemizan si priorizan la salud o la recuperación económica en un periodo de campañas electorales.
En la Península, Campeche es el único sitio en verde que no tiene limitaciones en el aforo, sus restaurantes y sitios de diversión se mantienen llenos principalmente los fines de semana, pero se deben observar las medidas de sana distancia.
Pese a la apertura económica, el mensaje es no bajar la guardia, aunque las vacaciones de Semana Santa no significaron un repunte en contagios, las concentraciones por el Día de las Madres, son foco rojo.