Un área de Pekín, la capital de China, ha sido sometida a estrictas medidas de confinamiento después de que surgiera el primer brote de covid-19 en más de 50 días.
Se cree que los nuevos casos están vinculados al mercado mayorista más grande de la ciudad.
Unas 45 personas de un total de 517 que fueron examinadas en el mercado de Xinfadi dieron positivo por COVID-19, según un funcionario del distrito. Ninguna mostró síntomas.
Las autoridades locales han impuesto medidas de cuarentena en 11 barrios cercanos y alrededor de 10,000 empleados del mercado serán sometidos a pruebas.
También tienen previsto examinar a todas las personas que hayan estado en contacto con el mercado, así como a los habitantes del distrito que lo rodea.
Se trata de los primeros casos confirmados en Pekín en más de 50 días.
¿Qué se sabe de los nuevos casos?
El mercado de Xinfadi, ubicado en el distrito de Fengtai, en el suroeste Pekín, fue cerrado en las primeras horas del sábado, después de que dos hombres que habían visitado recientemente el mercado dieran positivo por covid-19.
Después de que se realizaran una serie de pruebas en el mercado, se detectó que 45 personas habían contraído el virus.
“De acuerdo con el principio de priorizar la seguridad y la salud de las personas, hemos adoptado medidas de confinamiento en el mercado de Xinfadi y en los vecindarios alrededor”, informó Chu Junwei, un funcionario local.
La zona se encuentra en un “modo de emergencia en tiempos de guerra”, detalló.
Temores de una segunda oleada
Cientos de policías militares se han instalado cerca del mercado que ahora está cerrado. Las vías de transporte y las escuelas cercanas también han cerrado.
En Pekín, los eventos deportivos han sido cancelados y las principales instalaciones públicas están cerrando de nuevo.
Existen temores de que la ciudad sufra una segunda oleada de contagios.
El brote de coronavirus en China fue controlado con algunas de las medidas de confinamiento más estrictas en todo el mundo, poco después de que se detectara la enfermedad en la ciudad de Wuhan, a finales de 2019.
Según la Universidad Johns Hopkins, Estados Unidos, más de 4,600 personas en el país asiático han perdido la vida debido al COVID-19. La cifra de fallecidos se eleva a alrededor de 426,000 en todo el mundo.
De acuerdo al corresponsal de la BBC en China Stephen Mc Donell, los funcionarios chinos no están seguros de cómo el enorme mercado mayorista de Xinfandi, que suministra el 80% de las verduras y la carne en Pekín, se ha convertido en la fuente de un nuevo brote de coronavirus.
“En los últimos meses, la estrategia del gobierno chino ha sido aislar completamente cualquier pueblo o ciudad donde un grupo de personas se contagie de coronavirus”, señala Mc Donell.
“Esto parece haber funcionado, pero confinar a toda Pekín, en un momento en que parecía que el virus había sido controlado, no es algo que quieran apresurarse a hacer”, concluye.
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