México es considerado como uno de los países con mayor peligrosidad para desempeñar el periodismo.

La organización civil, Artículo 19, reporta 126 asesinatos de periodistas desde el año 2000 a la fecha, 117 hombres y nueve mujeres.

47 crímenes contra periodistas ocurrieron durante el gobierno del priísta Enrique Peña Nieto, convirtiéndose en el sexenio más sangriento para la práctica periodística. Mientras tanto, en los primeros siete meses de la actual administración de Andrés Manuel López Obrador, ya suman seis homicidios.

En su último informe -correspondiente al mes de mayo de 2019-, la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE), adscrita a la Fiscalía General de la República, registra 106 homicidios relacionados a la actividad periodística de la víctima, desde el año 2000 a mayor de 2019.

Los años más violentos para quienes ejercen el periodismo fueron del 2008 al 2010, en los que se registraron 10, 12 y 13 asesinatos, respectivamente. Durante 2019 no se han acreditado homicidios de periodistas, en los que la actividad profesional haya sido el motivo del crimen.

Los estados que encabezan la lista negra de homicidios son: Veracruz (19 casos), Chihuahua (15 casos), Tamaulipas y Guerrero (13 casos, cada uno).

Desde la creación de la FEADLE, en julio de 2010, se ha ejercido acción penal en 175 indagatorias por delitos contra periodistas, de los cuáles, 144 indagatorias han culminado en consignación y 31 que aún se encuentran en judicialización. En total, se han detenido a 121 personas relacionadas en la comisión de estos delitos.

En ese lapso se han emitido 13 sentencias por delitos contra la libertad de expresión, las cuáles han ido desde los tres meses, hasta los cinco años de prisión, además de pagos de multas, inhabilitaciones en el servicio público y el pago por la reparación del daño.

En total suman 1,186 indagatorias por diversos delitos contra la libertad de expresión ante la FEADLE, siendo los más comunes los siguientes:

Ciudad de México, Veracruz, Estado de México y Guerrero son los estados con mayor número de delitos contra periodistas; en contraparte, Colima, Durango, Querétaro, Zacatecas y Aguascalientes, son los estados del país en donde la labor periodística se puede realizar con un menor riesgo.

Bajo presupuesto para la investigación de delitos contra la libertad de expresión

A pesar de que en los últimos años ha ido en aumento la incidencia de delitos contra periodistas y la libertad de expresión, el presupuesto destinado a la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE) ha tenido una disminución bastante pronunciada desde 2013 al año en curso.

En su creación, en 2010, la fiscalía sólo recibió 695 mil 410 pesos para suministros y materiales. En 2012, los recursos aumentaron a 3 millones de pesos.

Sería en 2013 cuando habría un fuerte impulso a la investigación de delitos en contra de periodistas y representantes de los medios de comunicación, cuando se otorgó un presupuesto superior a los 38 millones de pesos.

Sin embargo, desde entonces el recurso para esta área ha ido en franco descenso hasta el presente año, en el que el Congreso de la Unión avaló un presupuesto de casi 13 millones de pesos, aplicados en su mayoría para el rubro de servicios personales.