Los expresidentes de Bolivia, Costa Rica así como el secretario de la OEA solicitaron en el Oslo Freedom Forum que México no permanezca indiferente a la crisis venezolana.
El rol que juega el gobierno de México en la región latinoamericana se volvió un tema central del Oslo Freedom Forum que arrancó este martes en el Museo Nacional de Antropología de CDMX.
En la primera mesa de debate del Oslo Freedom Forum (OFF) —que por vez primera se celebra en México y América Latina— participaron Luis Almagro, secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), así como los expresidentes de Costa Rica, Laura Chinchilla, y de Bolivia, Jorge “Tuto”Quiroga.
Luego de unos minutos de dialogar en torno a algunos de los problemas principales que azotan a la región latinoamericana como son la inseguridad, la violencia, la migración, entre otras, el tema Venezuela cobró especial relevancia.
El expresidente boliviano aludió a que México es punta de lanza de acuerdos estratégicos que requieren “acciones compartidas” de las naciones latinoamericanas pero, reclamó, que la República mexicana debe mirar al sur:
“Si México es la punta del nuevo acuerdo comercial, del acuerdo migratorio, de la lucha contra el narcotráfico, yo les pido y les imploro: miren al sur, porque vamos a tratar juntos de migración, comercio, narcotráfico con Estados Unidos, qué bien, pero también trabajemos juntos por la lucha por la democracia”.
Y en este punto el expresdiente Quiroga enfatizó: “La neutralidad de México sobre el caso de Venezuela y otras luchas que tenemos termina siendo cómplices de tiranías y deja a México desfasado de este propósito regional”.
Las ovaciones y aplausos se desataron en el auditorio principal del Museo de Antropología donde tiene lugar el OFF, encuentro organizado por la Human Rights Foundation (HRF) en el que activistas, emprendedores, tecnólogos de vanguardia, periodistas y artistas se unen para “hacer del mundo un lugar más pacífico, próspero y libre”.
Quiroga volvió a precisar: “Quisiéramos acciones”.
Bromeando añadió: “Ojalá aquí no haya mexicanos, ojalá no me deporten” y su frase desató las risas generalizadas entre los asistentes que atestiguaban el debate moderado por Luis Miguel González, editor general del diario mexicano El Economista.
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Aludiendo a los desafíos que se viven en términos de establecer acuerdos migratorios en América Latina, dijo que México “debe liderar” y que todos los países latinoamericanos “solamente nos integramos en la Champions, solamente ahí es donde el Chicharito, Messi y Luis Suárez juegan juntos”; pero acá, cada uno por su lado”. En su parecer, lo nodal es defender un marco migratorio común ya que, en su opinión si fracasa el nuevo Nafta, esto tendrá “un efecto cascada devastador” para todos las naciones de la región. Y en esto dijo que México lidera pero que debe ser “coherente y ayudar en la lucha por la democracia”
Quiroga pidió recordar lo que ha dicho el sudafricano Desmond Tutu que ha dicho, lo citó: “quien es neutro en situaciones de opresión, termina siendo cómplice del opresor y verdugo de los oprimidos”.
Criticó la neutralidad de México en “casos tan grotescos como el de Venezuela: la debacle económica más grande de América Latina, la cátastrofe humanitaria, la represión autoritaria, si pasa inválida y prevalece, va a tener un efecto contagio sobre Nicaragua, Bolivia y sobre otros”.
Y aquí hizo un llamado a México “el hermano mayor: súbase al barco, reconozcan a Guaidó y ayuden a luchar por la democracia en Venezuela”.
“Ortega le está ganando a Maduro”
Laura Chinchilla, Por su parte, refirió que la crisis venezolana está acaparando la atención de la prensa internacional y del mundo cuando la situación en Nicaragua es igualmente preocupante. “Angustia saber —precisó— que lo que ocurre en Venezuela y Nicaragua son crónicas previamente anunciadas”.
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La exmandataria nicaragüense refirió que la tendencia a derrocar a presidentes emanados por voto de la ciudadanía, y los nuevos “mecanismos de manipulación” de las dictaduras son preocupantes. Y al respecto de este punto, precisó:
“Daniel Ortega le está ganando a Maduro”. Y en este punto pidió a los ciudadanos nicaragüenses: “tengan cuidado con el diálogo”. Explicó que eso no significan que muchos crean en las bondades de dialogar pero, explicó, que si “no logramos que en el diálogo las garantías (a los derechos) estén sobre la mesa”, todo puede terminar en “una componenda” como la que llevo a Daniel Ortega al poder y él, aseguró, “solo ganará tiempo”.
Chinchilla dijo que todos los días “se construyen y destruyen democracias” pero que en los tiempos actuales es evidente que hay un riesgo de que “se deteriore la institucionalidad” de algunos países aún más.
No debemos ser permisivos: OEA
El secretario general de la OEA observó que el sistema interamericano debe continuar dando respuesta a los problemas cotidianos y graves que vive Venezuela. Entendiendo al “sistema” como garante del derecho, la justicia, la democracia. No olvidando que existen instrumentos como la Carta Interamericana y otras convenciones que proveen protección a las democracias y los derechos humanos.
Luis Almagro, en este punto, acotó: que “si somos permisivos” con una dictadura, con un gobierno ilegítimo”, pagamos todos. “Si somos permisivos, si somos neutros —afirmó— el futuro de este continente no va a ser muy bueno”.
El riesgo, subrayó Almagro, es que mañana todos pueden copiar esta experiencia y nuestros “países se pueden despeñar”.
El caso venezolano, dijo, “Es un estado criminal como no se ha visto desde Noriega”. Y agregó que “tenemos delincuentes y criminales y violadores de derechos humanos y corruptos atrincherados” y volvió a reiterar.
Cuestionado por el moderador de la mesa sobre que en Venezuela haya una “posible intervención militar”, el secretario de la OEA precisó:
“Intervención militar no, y somos los primeros en condenar la intervención militar, por una sencilla razón: cualquier lugar de texto de derecho internacional condena la intervención militar”.
Además, continuó, el derecho internacional tampoco permite que cualquiera “avasalle los derechos de cualquier población, de cualquier pueblo, ni actuar contra derecho”.