Trabajadores del servicio de traslados foráneos de ambulancias del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) podrían suspender el servicio en los próximos días en caso de que no se regularice el pago de viáticos, que presuntamente la institución dejó de pagar desde octubre.
Una decena de choferes de ambulancias se manifestaron esta mañana al exterior del Hospital General de Av. Universidad para exigir mejores condiciones laborales, ya que desde hace varios meses han tenido que pagar de su bolsillo los gastos de traslado de pacientes a hospitales foráneos de tercer nivel, ante la negativa del ISSSTE para el pago de viáticos.
“Yo creo que no vamos a aguantar más de 15 días, porque ya estamos hartos de esta situación y entonces sí nos podríamos ir a paro y que caiga la consciencia en ellos mismos, que la derechohabiencia sepa que cuando hemos querido parar el servicio nos amenazan y nos mandan personal de confianza, sin tener la capacidad para hacer los traslados porque no saben manejar una ambulancia”, señaló Fidel Campos Romo, conductor de ambulancia.
Los manifestantes refirieron que desde hace seis años se eliminó la tabla de kilometraje, que determinaba los gastos por trayecto, sustituyéndolo por un esquema de pago de viáticos, que comenzó a resultar insuficiente para los conductores.
“Únicamente nos pagan viáticos y se han venido reduciendo hasta un grado mínimo en que en estos momentos tenemos cinco meses que nosotros estamos poniendo de nuestro bolsillo los viáticos correspondientes, se nos dice que en 15 días se nos paga y ya son casi seis meses y no se nos paga, hacen perdedizos los documentos y no se nos paga”.
La situación se agravó en los últimos cinco meses en los que el instituto habría dejado de realizar los pagos de viáticos, forzando a los conductores a que desembolsaran recursos propios para costear los trayectos.
“Estamos trabajando bajo protesta, no hemos parado el servicio, hemos estado apoyando a los derechohabientes porque ellos no tienen la culpa de las condiciones que estamos pasando en el instituto”, añadió.
Fidel Campos señaló que para no afectar la salud de los pacientes se ha optado por continuar brindando el servicio, pero en caso de no regularizarse el pago se podrían parar las unidades.
““Normalmente el gasto por un traslado a la Ciudad de México son de 3 mil a 5 mil pesos, dependiendo el tiempo que se invierta, ese dinero se aplica principalmente en alimentos y en pago de casetas. A veces a México son hasta tres o cuatro viajes y a León son dos o tres viajes diarios”, declaró.
Los manifestantes informaron que para que se otorguen viáticos mayores a 24 horas –como son la mayoría de los traslados- se les obliga a pernoctar a los choferes de las ambulancias, a pesar de que por la urgencia de los viajes no se deberían detener las unidades.
“Generalmente son pacientes de cardiopatías o personas con quemaduras, todo lo que son enfermedades graves para ser atendidas en hospitales de tercer nivel son los que trasladamos”.
Asimismo, en los traslados que no contabilizan 50 kilómetros, que no rebasan la zona urbana y no requieren viáticos, se envía a los conductores sin documentación para protegerlos jurídica y laboralmente, además de que suele enviarse a conductores suplentes, que se encuentran en mayor estado de indefensión en caso de algún accidente.
De acuerdo a los manifestantes, ya se ha denunciado la problemática al Sindicato Nacional de Trabajadores del ISSSTE, pero no han realizado alguna acción para llegar a una solución.
“Tuvimos una reunión con autoridades delegacionales, pero a la hora de que se termina la junta y salimos no se avala por parte de ellos, hubo firmas de todos los choferes y extrañamente no lo firman ni las autoridades ni el sindicato para no tener un compromiso real con nosotros”, puntualizó.
Actualmente la plantilla del Hospital General del ISSSTE es de 13 conductores y una flotilla de seis ambulancias subrogadas a una empresa particular, aunque puntualizó que la inconformidad tiene alcance nacional.