El Congreso de Aguascalientes fue escenario de la disputa por la posible aprobación de una reforma que buscaba la protección a la vida desde la concepción.
Desde las 8 de la mañana, manifestantes a favor y en contra de la modificación a la Constitución se dieron cita con pancartas, pañuelos azules -a favor- y verdes -en contra-, equipo de sonido, matracas y todo tipo de utensilios que hicieran ruido.
La cantidad de asistentes fue tal, que poco antes de las 10 de la mañana se cerraron las puertas que dan acceso al recinto legislativo, generando enojo por parte de todos los manifestantes que tuvieron que quedarse en el vestíbulo.
El Congreso se mantuvo en relativa calma conforme se avanzaba en los puntos de la orden del día, hasta que se dio lugar a discutir la reforma constitucional propuesta por las Comisiones Unidas de la Familia y Derechos de la Niñez, así como de Gobernación y Puntos Constitucionales.
El dictamen, leído por Amézquita Carreón, pretendía establecer esencialmente que “toda persona tiene el derecho inherente a que se respete su vida desde su inicio en la fecundación…”. La diputada fue recibida por chiflidos de desaprobación principalmente.
La sesión dio lugar al debate del dictamen en el cual participaron seis diputados; Heder Guzmán Espejel, Cuauhtémoc Cardona Campos de Morena y Jorge Saucedo Gaytán del PRD en contra de la iniciativa, mientras que Sergio Augusto López Ramírez del PVEM, Alejandro Serrano Almanza y Gustavo Báez Leos del PAN a favor de que se aprobara el dictamen.
A pesar de que por primera vez en la historia, el Congreso de Aguascalientes cuenta con una mayoría de mujeres, ninguna de ellas participó en el debate.
La discusión en contra del dictamen, giró en el sentido de que la iniciativa iba en contra de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, cerrando la posibilidad de que las mujeres puedan decidir sobre sus cuerpos.
Guzmán Espejel calificó a la iniciativa como un “disparate jurídico” que contenía una serie de “aberraciones legislativas”. Al final de su participación propuso que el tema fuera el eje central de foros de discusión con especialistas en el tema.
Saucedo Gaytán agregó en su intervención que de aprobarse, la iniciativa marcaría un retroceso a la conquista de los derechos de las mujeres, y consideró que más debatir sobre la protección a la vida desde la concepción, era necesario legislar por una interrupción legal del embarazo a fin de combatir acciones peligrosas desde la clandestinidad.
Agregó que 45 por ciento de las mujeres que han tenido complicaciones en abortos en México, son mujeres vulnerables en situación de abandono, con precariedades económicas o que viven en zonas rurales.
Señaló también que la reforma lo que logra es criminalizar a la mujer que busca interrumpir su embarazo, además de obligarlas a ser madres contra su voluntad.
En contraparte, los diputados panistas argumentaron que el partido mantiene una deuda con el estado de Aguascalientes al prometer desde campaña, la protección a la vida a toda costa. Aseguraron que tuvieron acercamiento con médicos expertos en el tema, quienes les argumentaron que desde el punto su punto de vista, la vida inicia desde la fecundación.
Báez Leos solicitó, al finalizar su participación, que las y los compañeros consideraran permitir que la votación fuera por medio de cédulas, a fin de que la identidad del voto fuera secreta.
Tras la aceptación de 21 de los 27 diputados, se procedió a la entrega de los papeles donde cada uno marcaría el sentido de su voto.
Finalmente, la iniciativa obtuvo 17 votos a favor, 5 abstenciones y 5 votos en contra. Al no contar con el número de votos a favor que se necesitaba para ser aprobado, el dictamen, impulsado por los legisladores panistas, fue archivado como asunto concluido.