La Fiscalía General del Estado (FGE) de Jalisco liberó a dos presuntos involucrados en la desaparición de tres estudiantes de cine en Tonalá, el pasado 19 de marzo.
El primero de ellos, chofer de taxi, poseía el celular de uno de los jóvenes y lo vendió a otro que es reparador de teléfonos en Huentitán, el cual fue vinculado al caso por comprar el dispositivo.
El abogado del vendedor afirmó que su cliente cooperó con los agentes que llegaron a su local a solicitar información, pero fue detenido sin razón. El hombre estuvo cuatro días detenido y, según su abogado, no lo dejaron contactarlo.
La liberación del afectado se registró antes de responder al juicio de garantías y ayer por la tarde el taxista detenido también fue liberado.
Los alumnos desaparecidos de la Universidad de Medios Audiovisuales (CAAV) son Javier Salomón Gastélum, de 25 años; y Daniel Díaz y Marco Ávalos, de 20 años.
Entre las anomalías reportadas contra la FGE, están la declaración del comisario de seguridad de Tonalá, Miguel Magaña Orozco, quien criticó las acciones del personal de la Fiscalía, la cual, según él, intentó de incriminar a sus policías por la desaparición de los estudiantes.