En una reunión de emergencia los líderes izquierdistas de America Latina urgieron a Estados Unidos para que retracte una orden ejecutiva en la que declara a Venezuela como una amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, afirmóque su país no es una amenaza.
Ambos países llevan meses discutiendo pero la tensión se elevódespués de que el gobierno estadounidense anunciara sanciones en contra de siete oficiales venezolanos sospechosos de cometer actos en contra de los derechos humanos.
En la orden, el presidente Barack Obama afirma que la situación en Venezuela, incluyendo“los abusos por parte del gobierno a las garantías humanas de los ciudadanos, constituyen una inusual y extraordinaria amenaza a la seguridad nacional y la política internacional de Estados Unidos”.
Las palabras utilizadas en la orden causaron enojo no solo entre oficiales del gobierno venezolano, pero también entre sus aliados.
“Venezuela no tiene planes, ni ha tenido, ni tendránunca planes de atacar a Estados Unidos o a nadie más”, dijo Maduro en la reunión de Alba ( Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América) en la capital de Venezuela, Caracas.
El presidente recibióun fuerte respaldo del presidente Cubano, Raul Castro, quien anuncióun acercamiento al gobierno estadounidense en diciembre después de décadas de tensión. Castro dijo que“Estados Unidos necesita entender de una vez por todas que no puede seducir o comprar a Cuba, de la misma manera que no puede intimidar a Venezuela”, y añadió “nuestra unidad es indestructible”.
Por su parte el presidente de Bolivia, Evo Morales, dijo que“Estados Unidos tiene que entender que ya no vivimos en el imperialismo del pasado”.
Daniel Ortega, presidente de Nicaragua advirtióque la verdadera amenaza es Estados Unidos y no Venezuela.
En la reunión también se encontraba el ministro de relaciones exteriores de Ecuador, Ricardo Patiño, quien se preguntóque es lo que Estados Unidos,“un país que ha hecho legal la tortura y que ha desarrollado los sistemas más poderosos de espionaje”, puede enseñarle a America Latina sobre derechos humanos.
Las elecciones parlamentarias de Venezuela se llevaran al cabo más tarde este año, la fecha exacta aún no ha sido definida.
El 19 de marzo arrancó en todo el territorio venezolano la recolección de 10 millones de firmas para exigirle al presidente estadounidense, Barack Obama, que derogue el decreto donde declara a Venezuela“una amenaza inusual y extraordinaria a la seguridad nacional y política exterior de Estados Unidos”.