Sara Elizondo I Pachuca
Luego de que José Alfredo Sepúlveda Fayad, titular de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH), sugirió que los recursos para la compensación por el feminicidio de Jéssica, ocurrido en 2014, sean administrados por el estado y entregados en parcialidades a los deudos, Ana Lara, de la Colectiva de Mujeres contra la Violencia, afirmó que la petición del ombudsman es “totalmente inaceptable”.
“Esto se llama intentar revictimizar”, aseguró la activista, y consideró que esa propuesta está errada, pues instituciones de la entidad violaron los derechos de esa familia, por lo que la entrega no puede ser condicionada para realizarse en pagos, como planteó Sepúlveda Fayad, pues eso lo debe decidir el tutor de los menores hijos de la víctima.
“La madre de Jéssica y su hermana se hicieron cargo de la manutención y cuidado de los menores. No eran una familia de grandes recursos económicos, y merecen la reparación del daño, que no sólo abarca lo económico, sino también atención sicológica y la garantía de no repetición”, indicó Lara.
Insistió en que el dinero de la compensación, estipulada en la recomendación R-VG-0001-17, emitida en marzo de 2017 por la CDHEH, no puede ser administrado por el Estado, que ha sido “violentador de los derechos humanos”, sostuvo. “La madre (de la mujer) también es víctima indirecta y ella debe recibirla”, aseveró.
Tras el feminicidio de Jéssica, su hermana buscó el apoyo de la CDHEH. El organismo emitió la recomendación R-VG-0001-17, dirigida a la Secretaría de Salud (SSH) de Hidalgo, a la Procuraduría General (PGJEH) y al Tribunal Superior de Justicia del Estado de Hidalgo (TSJEH), pues las tres instancias intervinieron en la atención a la mujer y sus hijos, así como el Refugio para Mujeres, del que la víctima y sus descendientes fueron expulsados, lo que derivó en su asesinato.
EXPULSIÓN DERIVÓ EN UN FEMINICIDIO
En 2014, Jéssica y su hermano fueron asesinados por su pareja y cuñado, respectivamente, luego de que ella y sus hijos fueron expulsados del Refugio para Mujeres, al que acudieron para pedir protección ante la violencia ejercida por su agresor y padre de los menores.
Al respecto, la Colectiva de Mujeres contra la Violencia aseveró que se trató de una revictimización tanto de los hijos de Jessica como de su madre, quien ahora se hace cargo de los menores, después de que perdió a sus dos hijos por la negligencia de las instituciones del estado.