Los productores lecheros solicitaron nuevamente a la delegación de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en Aguascalientes, retomar la demanda que hace casi dos años dejaron pendiente para regular los productos engañosos del mercado que no son leche.
“Nosotros los ganaderos tenemos un problema, porque es una competencia muy desleal, es una competencia que no nos ayuda en nada, es una competencia que perjudica al consumidor porque lo están engañando”, dijo en entrevista Jaime González Ulloa, representante de los lecheros a nivel local.
Los productores entregaron su petición a la Profeco a mediados de 2016. Ya han pasado dos delegados por dicha instancia y hasta la fecha los productores no han recibido respuesta alguna.
Luego de la reunión que esta mañana tuvieron con el delegado de Profeco, Rodrigo Infante de Alba, los lecheros comentaron que se solicitó a la autoridad intensificar el seguimiento del caso y agregó que esperarán una respuesta la semana próxima.
Del total de marcas existentes en el mercado, según los productores, alrededor de un 30% no cumplen con las características de la leche y este es un detalle del cual no están conscientes los consumidores. Lo anterior afecta a la economía de los ganaderos porque es una parte del mercado al que ellos ya no llegan.
González Ulloa comentó que la afectación no es sólo para los productores, sino también para quienes consumen esos productos creyendo que son de leche.
Por otra parte, Jaime González reiteró que sigue pendiente la petición que a nivel nacional están haciendo a Liconsa para que incrementen en el precio de compra de 6.20 a 8 pesos.
Aunque los productores en Aguascalientes han optado por evitar la tira de leche e incluso el cierre de carreteras o vialidades, en caso de que no tengan una respuesta favorable se verá la posibilidad de tomar medidas de manifestación más radicales.
En la entidad, Liconsa compraba -hace aproximadamente tres años- 150 mil litros diarios de leche, los cuales fueron disminuyendo hasta vender sólo 50 mil litros, correspondientes a alrededor de 300 productores de Granjas Fátima y del municipio de Pabellón de Arteaga.
El excedente de 100 mil litros se distribuye entre la iniciativa privada, pero al precio bajo que ofrece Liconsa se le suma el incremento de la oferta y eso hace que el líquido se abarate aún más.
Agregaron que Liconsa no ha sido transparente en cuanto al procesamiento que hace de la grasa que resulta de la leche que les compran a los productores.
Por su parte, el delegado de Profeco dijo que en su momento, luego de la petición de los lecheros, se tomaron muestras de las fórmulas lácteas, se analizaron y se verificaron dando como resultado que los productos, al parecer, si cumplían con las normas.
“En el 2017, la Revista del Consumidor sacó un estudio de las leches que tenemos en el mercado y de las leches que no son leches, como la de coco, almendra, soya, toda esa información les fue proporcionada en su momento a los consumidores a través de la revista”.
Para el funcionario, en todo caso, la problemática es la publicidad engañosa que le hace creer a las personas que están consumiendo leche, cuando en realidad no es así y este es un tema que está pendiente por verificarse por parte de la Profeco.
Rodrigo Infante agregó que la dependencia a su cargo no está facultada para regular las prácticas de los comercios, esto respecto de la petición de los productores de que las fórmulas lácteas no se exhiban en la misma sección que la leche.