El atentado que cobró la vida de Ximena Guzmán, secretaria particular de la alcaldesa de Ciudad de México, y de José Muñoz, asesor gubernamental, fue un ataque directo y con un alto grado de planeación, confirmó este miércoles la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México.
El crimen ocurrió la mañana del martes en plena hora pico, cuando Guzmán recogía a Muñoz en un automóvil particular en una transitada avenida de la capital. Un hombre armado se acercó y abrió fuego, asesinando a ambos a plena luz del día. Según detalló la fiscal Bertha Alcalde Luján, el atacante no actuó solo.
“Se trató de un ataque directo y con un grado importante de planeación. Quienes lo ejecutaron tenían experiencia previa”, afirmó la fiscal en rueda de prensa. “Días antes se detectó a una persona vigilando a las víctimas en las inmediaciones del lugar del ataque, lo que refuerza la hipótesis de una ejecución premeditada”.
De acuerdo con la investigación, en el ataque participaron cuatro personas: el agresor directo y tres cómplices encargados de facilitar su fuga. Estos últimos utilizaron tres vehículos distintos, los cuales ya fueron asegurados por las autoridades.
Tras perpetrar el crimen, los responsables huyeron al Estado de México, donde continúan las labores de búsqueda y rastreo. Aunque aún no se ha confirmado un móvil, la fiscalía mantiene varias líneas de investigación abiertas, incluyendo posibles motivos personales, profesionales o externos.
“Conforme avance la investigación, iremos teniendo más claridad sobre el móvil y el contexto de este lamentable hecho”, agregó el secretario de Seguridad Ciudadana, Pablo Vázquez, presente también en la conferencia.
El doble homicidio ha generado preocupación en sectores políticos y ciudadanos ante la escalada de violencia en la capital del país, especialmente por tratarse de dos funcionarios públicos asesinados en una zona urbana y concurrida. Las autoridades aseguraron que seguirán reforzando las medidas de seguridad mientras se esclarece el caso. N