Debido al clima de violencia que persiste en Sinaloa, derivado del conflicto que libran desde septiembre dos facciones del Cártel de Sinaloa —Los Mayos y Los Chapitos—, el santuario de fauna silvestre Ostok Sanctuary, conocido por ser el más grande de México, tomó la decisión de cerrar sus puertas en Culiacán. En consecuencia, sus 700 animales, incluido el emblemático elefante “Big Boy”, fueron trasladados a Bioparc El Encanto, en Mazatlán.
“Siempre soñé con estar en mi ciudad, en Culiacán (capital del estado), junto a mis animales para tener una vida tranquila. La situación de inseguridad en Culiacán no nos garantiza el bienestar de estos animales y no quiero ponerlos en riesgo. Para mí, lo más importante son mi familia y mis animales. Por ahora hacemos una pausa. Estamos muy tristes; [incluso] los animales se sienten con una vibra diferente”, expresó el director y fundador del santuario, Ernesto Zazueta, a través de un video difundido este martes.
Medios nacionales reportan que Ostok Sanctuary se vio forzado a cerrar ante el incremento de extorsiones, amenazas, secuestros y robos con violencia de vehículos y equipos con los que habitualmente atendían a estos seres vivos. Asimismo, la decisión de mudar a la fauna cautiva se tomó por las graves dificultades que el equipo del santuario ha enfrentado para alimentarla, en medio de los bloqueos carreteros que vive la región a diario.
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El temor a ser víctimas de la delincuencia también ha alejado a veterinarios especializados, tanto nacionales como extranjeros, quienes han decidido no colaborar con el santuario ante las constantes balaceras que en ocasiones afectan a civiles ajenos al conflicto.
CÉSAR MILLÁN PRESENTE EN EL TRASLADO DE LOS ANIMALES DE OSTOK SANCTUARY
A través de una publicación en Instagram, Ostok Sanctuary mostró imágenes del traslado de varios de sus animales —como leones, jaguares, aves exóticas y tigres—, quienes fueron transportados en cajas especiales hacia su nuevo hogar. En el operativo también participó César Millán, reconocido internacionalmente como “El encantador de perros”, quien se sumó a la causa y brindó su apoyo durante el proceso.
En conferencia de prensa, Millán explicó que su visita a Sinaloa tenía un doble propósito: marcaba su regreso a Culiacán tras 34 años, además de permitirle involucrarse activamente en esta labor.
Fundado en 2021 por Ernesto Zazueta, la misión de Ostok Sanctuary es rescatar, rehabilitar y, cuando es posible, reintroducir en su hábitat natural a animales víctimas de tráfico ilegal, maltrato, abandono o violencia asociada al crimen organizado. El nombre “Ostok” proviene del náhuatl y significa “cueva”.
En sus primeros tres años de operación el santuario rescató a más de 1,800 animales. Y se sostienen principalmente mediante donaciones, patrocinios y recursos propios. De igual manera, ha establecido alianzas con organizaciones internacionales, como la Asociación Internacional de Cuidadores de Animales (AAZK), para mejorar el manejo y bienestar de la fauna silvestre bajo su cuidado.
Según EFE Verde (plataforma global de periodismo ambiental), con el elefante Big Boy se inauguró el santuario. De origen asiático y con 44 años, permaneció en cautiverio 30 años en circos de México.
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UNA VIOLENCIA QUE AFECTA A TERCEROS
Respecto a la ola de violencia, apenas este martes se localizaron cinco cuerpos en diferentes partes de Sinaloa. A tenor de Animal Político, la Fiscalía General del Estado informó que se abrieron las carpetas de investigación correspondiente por el delito de homicidio doloso.
En contexto, el enfrentamiento en el noroeste del país se desató tras la captura en Estados Unidos de Ismael el “Mayo” Zambada, quien asegura que fue secuestrado y llevado a ese país en un avión privado por un hijo de su antiguo socio, Joaquín el “Chapo” Guzmán, también preso en una cárcel estadounidense.
En palabras de Óscar Loza, presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Sinaloa (CEDH), este conflicto armado ha dejado un total de 39 menores de edad muertos y 97 desaparecidos. Para ejemplificar la problemática que vive la entidad, a finales de abril dos niñas de siete y 12 años murieron al quedar atrapadas en un enfrentamiento entre miembros de la militarizada Guardia Nacional y la Fiscalía con un grupo armado. N