Cuatro menores de edad acaban de interponer una demanda a la Fiscalía de Aguascalientes acusando responsabilidad patrimonial, dado que las autoridades encargadas de proteger a Nidia Adame, quien falleció en manos de su ex pareja en noviembre del 2023, no ejecutaron órdenes de protección pese a que la joven mujer, de 33 años, acudió a denunciar hechos en extremo violentos ante el ministerio público.
Marisa Rugarcía, asesora jurídica de la familia, explica que a través de la hermana de Nidia los menores ahora demandan a la fiscalía por:
1) No otorgar orden de protección a Nidia a pesar de haberla visto portando férula nasal y collarín, así como golpes visibles en su rostro.
2) No integrar de manera debida la carpeta de investigación, pese a que se debía configurar como tentativa de feminicidio.
Estas omisiones, señala la abogada, derivaron en la pérdida de la vida de Nidia el 7 de noviembre a manos de su agresor, quien le ocasionó quemaduras mortales al bañarla de gasolina y prenderle fuego frente a sus hijos
Y es que la mala gestión dentro de la Fiscalía se dió meses antes del último ataque: el 12 de agosto de 2023 Nidia acudió ante las instalaciones de la misma a presentar una denuncia en contra de su feminicida, pero ello no derivó en ninguna acción de protección.
Rugarcía explica que los hijos de Nidia tienen derecho a una indemnización debido a que, sin obligación jurídica de soportarlo, sufrieron un menoscabo en sus derechos y una afectación directa a su plan de vida, como consecuencia de la actividad irregular de la Fiscalía.
“Al no tener personal capacitado para atender asuntos de violencia de género y manejarlos con la debida diligencia, la falta de orden de protección a Nidia en su momento, desde luego, facilitó que su agresor perpetrara su feminicidio” declaró.
Esto se configura como un tema de interés superior de la niñez, detalló, pues los cuatro menores quedaron en orfandad.
“En un primer momento buscamos que los menores puedan tener una vida digna, en donde les puedan garantizar sus gastos educativos, el daño moral ocasionado y desde luego, el daño psicológico derivado de la pérdida de su madre, así como que se les los necesario para poder llevar una vida digna y garantizar su desarrollo” puntualizó la abogada.