Un británico de 34 años se aguantaba los estornudos porque creía que era muy poco higiénico hasta que llegó el momento en que su cuello sufrió una clase de explosión. Además de la lección aprendida, el hombre tuvo que pasar dos semanas en el hospital alimentándose a través de un tubo.
Este caso fue publicado en la revista médica BMJ Case Reports el lunes y ha llamado la atención de la prensa de inmediato. Según el informe, este hombre se tapó la nariz y mantuvo la boca cerrada durante un “fuerte” estornudo. Más tarde le dijo a los médicos que sintió un tipo de explosión en el cuello. No notó ningún problema de inmediato, pero un par de horas más tarde sintió dolor en la garganta y el cuello. Cuando tuvo hinchazón y su voz cambió, acudió al hospital.
“Este muchacho de 34 años de edad dijo que siempre evitaba estornudar porque creía que es muy poco higiénico estornudar en la atmósfera o en la cara de alguien. Eso significa que ha estado aguantando los estornudos durante los últimos 30 años más o menos, pero esta vez fue diferente “, dijo el autor del informe de caso, la Dra. Wanding Yang, quien trabaja en la University Hospitals of Leicester NHS Trust.
El reporte indica que los doctores vieron hinchazón en su cuello y cuando examinaron el tejido blando escucharon un crujido. Yang dijo que eso significaba que había burbujas de aire en los músculos del hombre y profundamente en su tejido.
Los escaneos confirmaron el problema. Las pruebas mostraron vetas de aire en la región retrofaríngea y enfisema quirúrgico extenso en el cuello anterior a la tráquea. Es decir, al tratar de aguantarse su estornudo, esto hombre se hizo un pequeño agujero en la garganta. “Afortunadamente, fue una perforación muy pequeña. No necesitaba ninguna operación”, dijo Yang.
El reporte indica que detener el estornudo bloqueando las fosas nasales y la boca “es una maniobra peligrosa y debe evitarse, ya que puede dar lugar a numerosas complicaciones, como neumomediastino, perforación de la membrana timpánica e incluso la ruptura de un aneurisma cerebral”.
No obstante, el reporte concluye que la perforación faríngea espontánea rara vez puede ocurrir después de un estornudo fuerte especialmente. En este caso, el hombre británico no padeció un daño permanente. Sólo los doctores le aconsejaron no taparse la nariz y la boca para no aguantarse un estornudo en el futuro.
Lee el informe del caso aquí.