72.7 grados centígrados
La sensación térmica del 31 de julio en Bandar Mahshahr, Irán
40.5 grados centígrados
Después de dos días, dispara una alarma de calor excesivo en Estados Unidos
Fuente: AccuWeather, Servicio Meteorológico Nacional (EEUU)
Según la recomendación del gobierno estadounidense, la temperatura interna mínima para cocinar carnes de aves debe ser de 73.8 grados centígrados. Esa misma fue, más o menos, la temperatura registrada el 31 de julio en la ciudad de Bandar Mahshahr, en el suroeste de Irán.
La “sensación térmica” de 72.7 fue la combinación de una temperatura real de 46.11 grados centígrados y una temperatura de punto rocío de 32.22 grados centígrados. El calor extremo fue parte de una reciente onda de calor que abrasó la ciudad, consecuencia de “un domo de aire caliente, inusualmente fuerte, que abarcó toda la región de Oriente Medio”, explica Anthony Sagliani, meteorólogo internacional de AccuWeather. Combinada con una “humedad extrema”, la alta temperatura está por precipitar uno de los veranos más calurosos en la historia de Irán.
Durante el mes de junio, las temperaturas récord registradas en el noroeste estadounidense (por ejemplo, 43.3 grados centígrados en Omak, Washington, y 40.5 en Bonners Ferry, Idaho) también podrían convertir el 2015 en un año récord para Estados Unidos. Desde 1901, la temperatura superficial en todo el país se ha elevado 0.13 grados Fahrenheit, con los mayores incrementos en el norte y oeste del país, así como en Alaska.
El Servicio Meteorológico Nacional emite una alarma de calor excesivo —la más grave— cuando se espera que la temperatura se eleve a 40.5 grados centígrados durante dos días, en combinación con lecturas nocturnas que no caerán por debajo de 23.8 grados centígrados. El umbral para dicha alarma varía en todo el país, pues algunos estados están más habituados que otros al calor extremo.
El año pasado fue el más caluroso jamás registrado en el planeta, e Irán no es el único país de Oriente Medio que ha experimentado la violencia del calor extremo este año. En el campamento para refugiados Zaatari, Jordania, donde las temperaturas escalaron a 41.6 grados centígrados en agosto, algunos residentes frieron huevos aprovechando el calor natural. Las ondas de calor se abatieron sobre Asia en junio y mataron 2500 personas en India y otras 2000 en Pakistán. Docenas más murieron en Egipto, el mes pasado, cuando la temperatura subió a 46.6 grados centígrados.
“Como nos dice la ciencia, con voz clara y estentórea —declaró Ban Ki-moon, secretario general de la ONU, durante las negociaciones sobre cambio climático, en junio—, sólo disponemos de unos pocos años para hacer lo necesario y tener una oportunidad razonable de mantenernos dentro del umbral de incremento de temperatura de dos grados [centígrados], acordado internacionalmente.”
Publicado en cooperación con Newsweek/ Published in cooperation with Newsweek.