Una mujer enfrenta cargos de asesinato después de pasarle drogas a un recluso al besarlo, lo que finalmente resultó en una sobredosis fatal.
La semana pasada, el Departamento Correccional de Tennessee, en Estados Unidos, informó en un comunicado que una mujer, identificada como Rachal Dollard, fue detenida por agentes especiales del departamento correccional y oficiales del Departamento del Sheriff del condado de Dickson.
El arresto y los cargos presentados contra Dollard se producen varios meses después del incidente inicial relacionado con el beso, que ocurrió en febrero, según explicó el Departamento Correccional de Tennessee.
De acuerdo con el comunicado, en febrero, los guardias de una prisión, el Complejo Industrial del Centro Turney, vieron a Dollard dándose un beso con un prisionero identificado como Joshua Brown.
Durante el beso, Dollard le pasó un “comprimido de globo que contenía 15 gramos de metanfetamina” a Brown, quien finalmente se la tragó, comunicó el Departamento Correccional de Tennessee.
Después de tragar el comprimido que contenía las drogas, Brown murió más tarde en un hospital local de una sobredosis.
Un portavoz del Departamento Correccional de Tennessee le dijo a Newsweek que Brown tenía 30 años y cumplía una sentencia de 11 años en prisión por cargos de drogas. “Su sentencia expiraba en 2029”, dijo el portavoz.
SOBREDOSIS DE DROGAS FATAL
Tras el arresto de Rachel Dollard, fue transportada a la cárcel del condado de Hickman. Actualmente está detenida por varios cargos que incluyen “asesinato en segundo grado e introducción de contrabando en una instalación penal”.
En el comunicado, el Departamento Correccional de Tennessee dijo que “emplea una variedad de herramientas” para evitar que las drogas y otros contrabandos ingresen en las instalaciones de la cárcel.
Estas medidas incluyen “registros a mano de cualquier persona que ingrese en las instalaciones, registros de vehículos y celdas, y perros de detección de drogas”. El comunicado de prensa también señaló que los funcionarios están trabajando para instalar escáneres corporales en algunas secciones de la cárcel como método de prevención adicional.
“Este incidente señala los peligros reales de introducir contrabando en las prisiones y las consecuencias que se derivan”, dijo el director de la Oficina de Investigaciones y Conducta del Departamento Correccional de Tennessee, David Imhof, en un comunicado.
“Nuestra agencia buscará procesar a cualquier individuo que amenace la seguridad de nuestro personal, a los hombres y mujeres bajo nuestra custodia, y nuestras instalaciones”, añadió.
Un incidente similar ocurrió en junio cuando a una enfermera de una prisión en Georgia la acusaron de pasarle drogas a un preso. Según la cadena de televisión WSB-TV en Atlanta, a la enfermera de la cárcel, identificada como Shaneika Roberts, la vieron en un video de vigilancia colocando un artículo en el bolsillo de un reo.
NUEVAS DROGAS EN LA CALLE
Una búsqueda en la celda del recluso finalmente descubrió las drogas y Roberts fue acusado de posesión de marihuana con la intención de distribuirla, informó Fox 5 Atlanta.
Ahora, los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley están advirtiendo sobre lo que llaman “fentanilo arcoíris”, que puede ser atractivo para los niños.
“Si lo miras, realmente tiene la consistencia de gis, pero parece un dulce chicloso, y es muy atractivo porque parece un caramelo”, dijo a Newsweek Kelly Sloop, farmacéutica y directora ejecutiva de la organización Need 4 Narcan.
Por otro lado, una nueva droga callejera llamada “Pyro” se vinculó con la muerte de un hombre de Colorado. Pyro, el nombre comercial de esta nueva droga, que es más fuerte que el narcótico de alto riesgo fentanilo, es una droga N-pirrolidino Etonitazena.
Se trata de un opioide sintético de alta potencia que es entre 1,000 y 1,500 veces más fuerte que la morfina. Mientras, el fentanilo es 100 veces más fuerte que la morfina, informó el jueves la estación local de noticias KKCO.
Y un hombre afirma que descubrió una bolsa de marihuana en el fondo de su entrega de alimentos de la app DoorDash. El repartidor regresó a pedir la “medicina”. N
(Publicado en cooperación con Newsweek. Published in cooperation with Newsweek).