El coordinador humanitario de la ONU, Mark Lowcock, ha dado este miércoles la voz de alarma sobre la grave situación que atraviesa Yemen, escenario de un conflicto desde hace más de cuatro años, y en particular de la inminencia de una hambruna en el país a menos que la comunidad internacional actúe para evitarlo.
“Los yemeníes no ‘pasan hambre’, se les está matando de hambre”, ha recalcado el secretario general adjunto de la ONU en su intervención ante el Consejo de Seguridad, asegurando que hay una “riesgo creciente” de hambruna en el país, donde en algunas zonas uno de cada cuatro niños está ya gravemente desnutrido.
“Palabras como ‘gravemente desnutridos’, ‘inseguridad alimentaria’ y ‘exceso de mortalidad’ son términos técnicos, neutrales y desapasionados que ocultan los horrores que la hambruna inflige en el cuerpo y en la mente”, ha subrayado Lowcock, que ha aprovechado para explicar detalladamente dichas consecuencias.
Yemenis are not “going hungry”.
They are being starved.
All of us – parties to the conflict, Security Council members, donors, humanitarian organizations and others – should do everything we can to stop this. Time is running out.https://t.co/q1W2IVCLkl
— Martin Griffiths (@UNReliefChief) November 11, 2020
Sin comida suficiente, el cuerpo se debilita y con ello es más fácil morir por otras enfermedades. En última instancia, “el cuerpo empieza a devorar a sus propios músculos, incluido el corazón. Muchos experimentarán alucinaciones y convulsiones antes de que finalmente el corazón se detenga”, ha ilustrado.
“Es una muerte terrible, agonizante y humillante y es particularmente cruel en un mundo como el nuestro, en el que hay de hecho más que comida suficiente para todos”, ha lamentado el jefe humanitario de la ONU. “Este es el destino que el mundo ha dejado colgando sobre millones de hombres, mujeres y especialmente niños yemeníes”, ha subrayado.
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Por ello, ha añadido, todos “deberíamos hacer todo lo posible para detenerlo” porque “el tiempo se agota”. “Hace dos años ya prevenimos la hambruna”, ha recordado, para volver a hacerlo ahora es necesario proteger a los civiles, para lo que hace falta un alto el fuego a nivel nacional; acceso humanitario; fondos para la asistencia; así como “progresos hacia la paz”.
Hasta ahora, la ONU solo ha recibido este año 1,500 millones de dólares, el 45 por ciento de los fondos que solicitó, mientras que “el año pasado para estas fechas habíamos recibido el doble, casi 3,000 millones”, ha lamentado Lowcock. “Más dinero para la operación de asistencia es el modo más rápido y eficiente de apoyar los esfuerzos de prevención de la hambruna ahora mismo”, ha recalcado.
Catástrofe en Yemen
El director ejecutivo del Programa Mundial de Alimentos (PMA), David Beasley, también ha trasladado un mensaje de urgencia al Consejo de Seguridad. “Estamos en una cuenta atrás para la catástrofe en Yemen”, ha resumido. “Tenemos que hacer que el mundo abra los ojos, se dé cuenta de que lo que estamos viendo es el desarrollo de un desastre humanitario, antes de que sea demasiado tarde”, ha añadido.
“Si elegimos mirar para otro lado, no tengo ninguna duda de que Yemen se verá sumido en una devastadora hambruna en unos pocos meses”, ha prevenido Beasley, lamentando la vuelta a la situación de hace dos años.
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El máximo responsable del PMA ha lamentado las “obstrucciones innecesarias” con las que se encuentran las organizaciones humanitarias a la hora de llevar a cabo su labor, especialmente por parte de los rebeldes huthis, y ha precisado que esto ha provocado a su vez que los donantes pierdan la confianza en la efectividad de la ayuda, reduciendo sus contribuciones.
“Las luces de advertencia están parpadeando y no son amarillas, son rojas, todo lo rojas que pueden ser”, ha advertido Beasley, subrayando la importancia de actuar ya y no esperar a que se declare la hambruna.
Por ello, ha pedido fondos a los donantes, advirtiendo de que si no llegan el PMA tendrá que volver a reducir las raciones que entrega a millones de yemeníes nuevamente en enero y para marzo podría quedarse sin fondos. “No puedo ni siquiera empezar a contaros la catástrofe que eso supondría”, ha afirmado. “Por eso os pido que no le deis la espalda a los yemeníes”, ha remachado.