Desde abril son las mismas caras detrás de las mascarillas, pero ahora lucen con ojos cansados y marcas en la piel, provocadas por las seis horas diarias del equipo de protección personal.
La Dra. González*, adscrita a uno de los Centros Covid del sistema de salud federal en Aguascalientes, sabe que la fatiga y el cansancio no sólo son físicos, sino que se han vuelto mentales, sin saber cuándo podrán terminar.
Lo único que la reconforta y la hace olvidar su presente aunque sea un momento, es salir a correr, tomar aire, ese que tanto requieren los pacientes que diariamente llegan al hospital, a debatirse entre la vida y la muerte.
Aquí su testimonio:
– ¿En este momento, cuáles son sus sentimientos como personal médico que se encuentra laborando en la contingencia del Covid-19?
Cansancio físico y mental, pues la gente no toma las medidas de protección necesarias y los pacientes no dejan de llegar a hospitalizarse.
– ¿De qué forma ha impactado el Covid-19 en su vida diaria?
Exceso de trabajo, cansancio, Síndrome de Burnout, estrés, tensión emocional por sacrificar tus pasatiempos por la situación actual.
– ¿Qué actividades cotidianas ha tenido que modificar?
La higiene que tomo ahora es excesiva, cambio de ropa varias veces al día, no puedo acercarme a nadie al llegar, sino hasta que te hayas bañado y cambiado de ropa.
– ¿Tiene contacto con su familia?
Sí tengo contacto pero solo de entrada por salida, procurando la sana distancia.
– ¿Ha tenido estrés, agotamiento, ansiedad o depresión durante los meses de la contingencia? ¿Cómo ha sobrellevado esos episodios?
Sí, desde el principio de la pandemia, por la carga de trabajo que tenemos y la responsabilidad con la que cargamos.
El estrés y cansancio es parte de nuestras vidas; la manera de sacarlo es mediante el ejercicio, salir a correr despeja mi mente.
– ¿Ha recurrido a atención psicológica especializada o a algún tipo de terapia?
Hasta ahorita no he tenido la necesidad de recurrir a terapia.
– ¿Cómo es su día a día? Platíquenos su jornada laboral.
Llego al hospital a las 7:00 am, comenzamos con clases, después paso visita en pacientes hospitalizados, bajo a la consulta, checo mi salida.
Me pongo mi equipo de protección personal y posteriormente reviso a los pacientes intubados, manejo los ventiladores, estoy al pendiente de los egresos, compruebo asistencias de personal médico, hago informes…
Estoy seis horas con el equipo de protección personal, salgo, termino mi día a las 11:00 p.m. y ya a esa hora puedo irme a dormir.
– ¿Cómo se encuentra la capacidad hospitalaria donde usted labora? ¿Hay camas y personal suficientes?
Esta semana bajo la ocupación hospitalaria. Tenemos capacidad para recibir a 150 y llegamos a 96 pacientes.
Hay personal insuficiente y fatigado porque somos los mismos que nos metemos desde abril a la zona Covid, diariamente.
– ¿Ha padecido el Covid-19 en algún momento, o alguna persona de su entorno más próximo (familiares, amigos…)? ¿Cómo vivió ese momento?
Yo no, pero algunos primos y tíos sí, afortunadamente ninguno grave.
– Descríbanos lo primero que usted observa al llegar al hospital, ¿cómo se ven las instalaciones?, ¿descríbanos el rostro del personal médico?
Al ingresar se siente mucha tensión, miedo de los pacientes, estrés, fatiga, cansancio, desesperación…
– ¿Qué mensaje envía a las personas que en este momento han dejado de acatar las medidas sanitarias?
El personal de salud estamos sacrificando nuestra salud y vida por ustedes, por favor usen el cubrebocas.
* Nombre asignado para preservar la identidad y privacidad de la entrevistada.