La nueva la licencia sanitaria, que fue propuesta por la Comisión de Salud del Congreso del Estado, no implicará un mayor gasto para los empresarios en Baja California, según la diputada Montserrat Caballero, presidenta de la Junta de Coordinación Política de la XXIII Legislatura del Estado.
“No será un nuevo impuesto, ni será un documento recaudatorio; simplemente es la sustitución de la actual licencia sanitaria que otorga Coepris, ya que hemos detectado una serie de ambigüedades que propician un riesgo innecesario para la salud de los bajacalifornianos”, dijo la diputada, refiriéndose al trámite de la Protección contra Riesgos Sanitarios (COEPRIS).
La semana pasada, el Comité de Técnico Estatal del Consejo Empresarial (CCE) rechazó la aplicación de nuevos cobros tanto a restaurantes como en hoteles y otros comercios.
Carlos Ibarra Aguiar, presidente del comité, dijo que era inadmisible someter a estos negocios al pago de sobrerregulaciones que no podrán soportar, ante la afectación económica de la pandemia por COVID-19.
Al respecto, la diputada hizo un llamado a no interpretar erróneamente las propuestas legislativas en materia de salud.
De acuerdo a un comunicado, Caballero mencionó la necesidad de instrumentar nuevas políticas públicas en materia de salud.
Señaló que al mismo tiempo se fortalecerá el esquema de recursos humanos de la Coepris, para incrementar la supervisión sanitaria en la entidad.
Dijo que el propósito de estas medidas es el de cuidar la salud de la ciudadanía y regular las actividades de todos aquellos giros, no sólo restaurantes que manejen productos perecederos, como almacenes de comida.
También establecimientos que deben tener una alto nivel de exigencia sanitaria como hospitales, clínicas, funerarias, rastros, albercas, baños públicos, hoteles, etc.