El exvicepresidente de Estados Unidos Joe Biden ganó el sábado las primarias demócratas en Carolina del Sur, relanzando su campaña y confirmándose como el primer rival del favorito Bernie Sanders.
Minutos después de que cerraran las urnas en ese estado del sureste del país, las principales cadenas de televisión anunciaron en base a proyecciones el triunfo de Biden, con el cual el veterano político resucita sus esperanzas de convertirse en el candidato que le disputará la reelección a Donald Trump en noviembre.
La difusión de proyecciones unánimes tan temprano indica que Biden habría logrado una victoria decisiva en este estado que ha sido históricamente su bastión político y donde la minoría negra compone un 60% del electorado demócrata.
“¡Gracias Carolina del Sur!”, tuiteó Biden, un moderado de 77 años que fue ocho años vicepresidente de Barack Obama, primer presidente negro del país, poco después del anuncio. “Juntos, ganaremos esta nominación y venceremos a Donald Trump”, agregó.
Biden, segundo en intención de voto a nivel nacional, llevaba por lejos la delantera en los sondeos en Carolina del Sur. Le seguían Sanders, una quincena de puntos más abajo, y el multimillonario y activista medioambiental Tom Steyer, firme en el tercer lugar aunque es casi desconocido en el resto del país.
Steyer, de 62 años, alcanzó gran popularidad con una inversión de más de 23 millones de dólares en publicidad y promesas de reparaciones a descendientes de esclavos. “Espero sorprender con un buen resultado aquí”, dijo Steyer en CNN.
Proyección al supermartes
Biden, quien hasta el mes pasado encabezaba la intención de voto demócrata en todo el país, necesitaba desesperadamente ganar en Carolina del Sur luego de decepcionantes resultados en las tres primeras contiendas: quedó cuarto en Iowa, quinto en New Hampshire y en lejano segundo lugar en Nevada.
“La pregunta más importante es si esto lanzará a Joe Biden a la victoria en algunos estados del supermartes”, dijo Larry Sabato, director del Centro de Política de la Universidad de Virginia.
En el llamado supermartes de la próxima semana votan 14 estados y se elige más de un tercio de los delegados a la convención partidaria de julio que decidirá la nominación.
En un centro de votación en Columbia, la capital estatal, Samantha Rogers consideró que Biden es el único que puede enfrentarse a Trump. “Tiene más experiencia, él está con todos, no solo con las personas de color”, dijo esta jubilada de 67 años, comparando su “elocuencia” con la de Obama.
“Bernie energiza”
Sanders, un senador de 78 años que se presenta como un “socialista democrático”, es el claro líder de la carrera demócrata hasta ahora, luego de ganar en New Hampshire y en Nevada y terminar en un empate virtual en Iowa con el exalcalde de South Bend, Indiana, Pete Buttigieg.
Pero su ascenso preocupa a algunos moderados, que temen que sea demasiado izquierdista para vencer a Trump.
Donna Boyd, una empresaria de 51 años que acababa de votar por Sanders, rechazó esta idea. “Yo creo de hecho que es el único que puede ganarle a Trump”, dijo.
“Bernie energiza a la gente. Nos habla a todos y es incluyente. El problema será conseguir la nominación porque el partido Demócrata no lo quiere”, añadió.
Unos 700 “superdelegados”, legisladores y figuras notables del partido votarían en una segunda ronda en la convención partidaria si Sanders o cualquier otro candidato no alcanzara el apoyo de la mayoría absoluta (1.991) de los delegados requerido para obtener la nominación presidencial.
El tuit de Trump
Trump, que sigue de cerca las primarias demócratas, no tardó en opinar sobre la interna demócrata.
“La victoria del Dormido Joe Biden en las primarias demócratas de Carolina del Sur debería ser el final de la broma de una campaña de Mini Mike Bloomberg. Después del peor desempeño de debate en la historia de los debates presidenciales, Mini Mike ahora tiene a Biden dividiendo a sus muy pocos votantes, ¡llevándose a muchos!”, tuiteó.
Tras este triunfo, Biden compite por el polo moderado del partido con el multimillonario Bloomberg, el último en lanzarse a fines de noviembre, pero que ya aparece tercero en las encuestas en todo el país.
El exalcalde de Nueva York, de 78 años, quien ya gastó 500 millones de dólares de su fortuna personal en publicidad, se saltó la primeras cuatro internas estatales y recién se medirá en las urnas el supermartes.
También pelean por el centro Buttigieg, de 38 años, y la senadora de Minnesota Amy Klobuchar, de 59. Ambos lograron buenos resultados en estados étnicamente poco diversos, como Iowa y New Hampshire, pero no han podido probar su arraigo entre las minorías, claves para ganar la nominación.
La senadora Elizabeth Warren, una progresista de 70 años, hace unos meses favorita y ahora opacada por Sanders, también se pone a prueba este sábado.