El 26 de agosto del 2015 inició una historia de terror para la familia de Paulina Camargo Limón que al día de hoy no termina; cuatro años después, la joven de 19 años y cuatro meses de embarazo aún no ha sido hallada, en la Fiscalía General del Estado (FGE) la carpeta de investigación continúa con el estatus de “desaparecida”.
Cuando se cumple el cuarto aniversario de su desaparición, familiares y amigos de “Pau” celebraron una misa en la catedral poblana, desde donde llamaron al gobernador Miguel Barbosa Huerta a no cerrar las puertas de Casa Aguayo, como lo hicieron los exgobernadores Rafael Moreno Valle Rosas (t) y Antonio Gali Fayad, quienes ignoraron la petición de audiencia.
Ayer por la mañana, cuando se terminó el rito religioso celebrado puntualmente cada año, la familia de la joven desplegó la pancarta en la que se muestra la última foto de Paulina Camargo en la que es visible su embarazo y al lado derecho la consigna: “Ni Rafael, ni Tony, ni Martha lograron encontrarme, gobernador Barbosa ¿tú sí lo harás? ¡Lo prometiste!”.
Este 2019, la exigencia del esclarecimiento del paradero de Paulina empezó desde el sábado por la noche cuando fueron colocados lonas en la zona de La Margarita, el CIS, la Fiscalía General del Estado y los Juzgados, recorrido urbano que la familia y amigos han hecho buscando la resolución del caso.
“Señor Fiscal ya son cuatro años Desaparecida. Cuatro años de dolor, de angustia, de Injusticia. ¡Necesitamos RESULTADOS! URGENTES” rezaba la manta colgada en el puente cercano a las instalaciones de la FGE.
En la manta dedicada a los magistrados se leía “¡Magistrados, no amparen a mi Asesino, mi familia lleva cuatro años buscándome, merecemos justicia!” también se desplegaron otras con la leyenda “A los jueces y magistrados Federales exigimos NO AMPARAR a un ASESINO CONFESO de Paulina Camargo y su bebé”.
En la zona de La Margarita se expusieron las enormes lonas en las que se leía: “Soy Paulina Camargo. Desaparecí hace cuatro años en la UH La Margarita. ¿sabes algo? Tu denuncia será Anónima”. Una más señalaba “Paulina. Cuatro años que fuiste arrebatada de tu familia, de tu vida, de tu hijo. Tu familia te ama sigue orando para que este calvario llegue a su fin. Acompáñanos, misa de honor”.
Familiares y amigos también hicieron una oración en la Unidad Habitacional de La Margarita, colonia donde se ubicaba el domicilio de José María Sosa Álvarez, novio de Paulina Camargo quien recientemente fue sentenciado por el homicidio de la joven.
Rocío, la madre de Paulina acudió al departamento de interés social del joven el 26 de agosto del 2015, buscando a su hija. Lo que encontró fue un fuerte olor a cloro y la evidencia de que se había hecho una limpieza exhaustiva en el lugar.
Después, la familia descubrió que en ese departamento había una mancha de sangre que correspondía a los perfiles genéticos de Paulina y su bebé. El propio José María habría confesado que estranguló a Paulina dentro del domicilio y luego tiró el cuerpo a un contenedor de basura. Aunque se hizo una exhaustiva búsqueda en todos los contenedores y el relleno sanitario, jamás se encontró su cadáver.
En su momento, tanto el hallazgo de la sangre como la confesión del joven fueron desestimados por el Segundo Tribunal pues se argumentó que no existía orden de cateo y que el dicho del joven se había obtenido bajo tortura.
La joven fue vista por última vez un día antes, el 25 de agosto cuando abordó un taxi luego de que se encontrara con su novio José María “El Chema”, supuestamente para ir al ginecólogo, pero nunca se le volvió a ver.
En febrero de este año, el juez Tercero de lo Penal sentenció a 16 años y seis meses de prisión a José María Sosa Álvarez, por el delito de homicidio simple en agravio de Paulina Camargo Limón. La familia de Chema y su defensa, señalan que no había ninguna prueba contundente en su contra, pues hasta el momento la Fiscalía General del Estado (FGE) ha sido incapaz de localizar el cuerpo o pruebas contundentes de que Paulina esté muerta.
La sentencia de José María es el primer caso en el país en la que existe condena por homicidio y aborto sin que exista evidencia de los cuerpos.
La demanda principal: el hallazgo del cuerpo
La familia de Paulina Camargo sostiene la demanda de justicia desde el primer día que se reportó su desaparición. A la fecha se reveló que la sentencia por el delito de desaparición de persona está pendiente, pues la defensa legal de José María ha buscado amparos que han retrasado el proceso.
Sin embargo, la exigencia principal sigue siendo el hallazgo de la joven.
Datos periodísticos señalan que de 2014 a mayo del 2019 al menos dos mil 893 mujeres fueron reportadas como desaparecidas en el estado de Puebla. Al día de hoy, las autoridades han localizado a mil 741; 18 de ellas muertas, del resto se desconoce su paradero.
Familiares de Paulina Camargo aseguraron que continuará alzando la voz para visibilizar el drama que se vive en miles de familias para quienes no ha habido diligencia de autoridades, voluntad política o respuesta oficial a la desaparición de mujeres y niñas en Puebla y el país.