Bajo el esquema de “Familias de Puertas Abiertas” del DIF Estatal, un total de 22 menores bajo la tutela del Estado han sido colocados en las denominadas “familias de acogida”, que les permite desarrollarse dentro de ese núcleo mientras se resuelve su situación jurídica, evitando que ingresen a un centro de asistencia social.
Uno de los testimonios es el de Ady y Alejandro, quienes le abrieron las puertas a la pequeña “Mariana” desde diciembre del año pasado. La pequeña les ha ayudado a ser más organizados, a disfrutar el tiempo que conviven con ella y a entender mejor a los niños.
El programa desde el 2018 ha certificado a 15 familias, a las cuales previamente evalúa para ejercer el cuidado del menor. Terminado el proceso, éste podrá volver con su familia de origen o ser sujeto a adopción.
Los interesados en participar en este esquema pueden acudir a las oficinas de la Procuraduría de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes, sita en calles 12 y Tamborel, en la colonia Santa Rosa.