Si vas de negocios a Tokio, sabes que necesitas algunas recomendaciones para hacer de tu vuelo una experiencia placentera que te permita llegar a trabajar. Elegir una aerolínea con servicios cómodos, dormir toda la noche y llevar ropa holgada deben estar en tu lista.
1.- Viajar en BUSINESS CLASS o en PREMIUM ECONOMY es una inversión que te permitirá amortiguar los efectos del jet lag, pues te garantizan un descanso más placentero por el tipo de asientos que tienen estas cabinas. Entre las amenidades que te ofrecen están las salas de espera privadas en el aeropuerto, algunas incluyen duchas y salas de descanso para relajarte antes de abordar. Además te ofrecen prioridad en el check-in de tu vuelo y entrega de equipaje, lo que se traduce en ahorro de tiempo y mayor comodidad.
2.- Aprovecha que los asientos de la Clase Ejecutiva se reclinan totalmente hasta hacerse cama. La aerolínea japonesa ANA (All Nippon Airways), por ejemplo, ofrece un vuelo directo y sin escalas entre Ciudad de México y Tokio, con un moderno Boeing 787 y cuyos asientos BUSINESS CLASS son completamente reclinables, con edredón y almohada, que te harán sentir como en casa a 12 mil metros de altura.
3.- Disfruta del entretenimiento que te ofrece la aerolínea, pues además de tus propias lecturas o gadgets, podrás ver esa película que te perdiste en el cine y que seguramente está en uno de los 390 canales a bordo —también disponibles en español—.
4.- Si necesitas trabajar, puedes conectar tu computadora o recargar tu celular, ya que los asientos vienen equipados con puertos de alimentación eléctrica, con luz de lectura dirigible integrada al asiento y una mesa de servicio bastante amplia.
5.- El menú a bordo está preparado por un equipo especializado de chefs que te dan dos opciones: comida occidental o japonesa. Este es un momento para comenzar a familiarizarte con la comida y los sabores que te sorprenderán durante la siguiente semana.