Un sismo de magnitud 6.8, según el Instituto Geológico de Estados Unidos (USGS), tuvo lugar el jueves por la noche frente a la isla griega de Zante, en el mar Jónico, y provocó daños leves, según las primeras informaciones.
El observatorio de Atenas, por su parte, estimó que la magnitud del sismo fue de 6.4.
Según la página web del Instituto Geológico de Estados Unidos (USGS), que anunció el temblor en primer lugar, el sismo se registró a 35 kilómetros al suroeste del pueblo de Lithakia, en la isla de Zante.
La red eléctrica resultó parcialmente dañada y se registraron daños causados por deslizamientos de terreno, según medios locales.
“No hubo daños en las casas, según las primeras informaciones”, indicó a la AFP un responsable de la oficina de prensa de los bomberos.
El sismo también causó daños en Pyrgos, una ciudad del oeste del Peloponeso, en Grecia continental, frente a Zante. Según los bomberos, la valla de una iglesia se hundió y dañó a un vehículo, sin causar víctimas.
Una torre, un monumento bizantino del siglo XII, situado en una pequeña isla cercana a Zante, sufrió importantes daños, indicaron medios locales.
Según el observatorio de Atenas, se produjeron al menos cuatro temblores el jueves por la noche, con magnitudes respectivas de 4.9; 5.0; 5.1 y 6.4 para la última, la más fuerte.
El epicentro del sismo se encontró en el mar, a 287 km al oeste de Atenas, según el observatorio de Atenas y a 44 km de las costas de Zante.
El sismo tuvo lugar a una profundidad de 5 km, según el observatorio de Atenas, y de 16.6 km, según el USGS.
Grecia, especialmente el oeste y el sur del Peloponeso, está situada en líneas de falla importantes, y suele verse afectada por sismos, que no suelen causar víctimas.
En julio de 2017, sin embargo, un sismo de magnitud 6.7 acabó con la vida de dos personas en la isla de Kos, en el mar Egeo (sureste), y provocó daños importantes.
En septiembre de 1986, un sismo de magnitud 6.2, ocurrido en Kalamata, capital de Mesenia, causó 20 muertos y el derrumbe de muchas viviendas.