Hong Kong dará a los homosexuales extranjeros la posibilidad de unirse a sus parejas que trabajan en la megalópolis con un visado “marital”, en vez de con la visa de turista más restrictiva.
Las autoridades de la excolonia británica anunciaron el martes una revisión de su política de migración, para adecuarla a una sentencia emitida en julio por la Corte de Apelación de Hong Kong.
La más alta jurisdicción del territorio semiautónomo del sur de China acordó entonces el derecho a vivir y a trabajar en la megalópolis a una lesbiana británica, a la que se le había negado un visado “marital” por ser pareja de una mujer.
En este alto lugar de las finanzas, los mayores bancos internacionales salieron en su defensa argumentando las necesidades de contratos.
La demandante, identificada solo con las letras “QT”, llegó a Hong Kong en 2011 después de haber contraído en Reino Unido una unión civil con “SS”.
Esta última viajó a Hong Kong contratada para un nuevo empleo. Hong Kong no reconoce el matrimonio gay o las uniones entre personas del mismo sexo, por lo que “QT” no pudo en un principio obtener un visado de dependiente, que permite trabajar, sino solo una visa turística.
A partir de ahora, cualquier extranjero que haya contraído una unión civil, o un matrimonio, con una persona de su sexo podrá optar desde el miércoles a un visado de dependiente.
Sin embargo, el gobierno precisó que el único matrimonio reconocido en Hong Kong es el contraído entre personas heterosexuales, y no se contemplaba la legalización de las uniones entre personas del mismo sexo.
La homosexualidad en Hong Kong fue despenalizada en 1991.
(Con información de AFP).