La fiscalía de Los Ángeles anunció el martes que no imputará por abuso sexual al actor Kevin Spacey, que perdió su papel en la serie “House of Cards” tras múltiples denuncias de abuso en el surgimiento del escándalo del renombrado productor Harvey Weinstein, era acusado de acosar y abusar sexualmente de un colega en 1992.
“La acusación está fuera de la ley de prescripción, por lo tanto no se justifica un análisis de las fortalezas y debilidades de la evidencia y se rechaza el proceso”, indicó la fiscalía.
A Steven Seagal y Anthony Anderson, que eran investigados de forma separada, tampoco se les imputarán los cargos.
Las acusaciones contra Spacey y Seagal, explicaron los fiscales a la AFP, prescribieron, mientras que en el caso de Anderson, protagonista de la serie “Black-ish”, la víctima declinó hablar con las autoridades.
La acusación contra Anderson se registró supuestamente en esta primavera boreal. El implicado la ha negado.
Una mujer había dicho a las autoridades que fue atacada en un evento organizado por el propio actor, pero ahora la víctima “declinó ser entrevistada por el investigador”.
Spacey y Seagal enfrentan imputaciones en otras investigaciones.
Spacey es acusado por más de una docena de hombres y jóvenes. Ha sido investigado también en Londres.
Su agente dijo en noviembre pasado que el dos veces ganador del Óscar “estaba tomando el tiempo necesario para buscar una evaluación y tratamiento”.