Efraín González Muro, director del Centro de Atención Vive Aguascalientes (CAVA), denunció que en el Centro Ambulatorio para la Prevención y Atención del Sida e Infecciones de Transmisión Sexual (Capacits) persisten los malos tratos hacia pacientes con VIH, incluyendo discriminación y negación de medicamentos.
Según el activista, las quejas provienen del área de enfermería de la clínica, perteneciente al Instituto de Servicios de Salud del Estado de Aguascalientes (ISSEA). Hasta el momento, se han registrado al menos siete denuncias formales de usuarios afectados.
González Muro señaló directamente al equipo de enfermería de Capacits por poner trabas en la entrega de medicamentos esenciales como los antirretrovirales y el tratamiento preventivo para el VIH (PrEP).
“Tenemos por lo menos siete quejas escritas a puño y letra de los usuarios, donde la enfermera y su equipo les niegan el medicamento o les dificultan el acceso a él. Esto es grave porque los antirretrovirales son esenciales para la salud de los pacientes”, denunció.
De acuerdo con el activista, la falta de acceso a estos tratamientos ha provocado que más del 60% de los pacientes abandonen el uso del PrEP, lo que incrementa el riesgo de nuevas infecciones.
En este sentido, hizo un llamado al director del ISSEA, Rubén Galaviz Tristán, para que tome medidas urgentes ante esta problemática. Anunció que presentará las siete quejas ante la institución y solicitará la destitución de la enfermera señalada.
“Otra vez el llamado al Dr. Rubén Galaviz. Sé que está comprometido con mejorar el sistema de salud. Pedimos que esta enfermera sea removida, ya sea por jubilación, renuncia o despido, porque su permanencia sigue afectando a los pacientes”, declaró.
Obstáculos en el IMSS e ISSSTE
González Muro también señaló que la situación no es exclusiva del Capacits, pues en clínicas del IMSS y el ISSSTE también hay obstáculos para que los pacientes reciban los medicamentos necesarios.
En el IMSS, denunció que el personal no está capacitado sobre tratamientos como el PrEP, lo que obliga a los pacientes a dar múltiples vueltas sin recibir su medicamento.
“Nos dicen que los mandemos a clínicas familiares, pero cuando llegan, el personal no sabe qué es el PrEP. Entonces, tenemos que intervenir con los directivos para que les den el medicamento”, explicó.
Respecto al medicamento de emergencia, el cual debe administrarse en las primeras 72 horas tras una exposición de riesgo para prevenir la infección por VIH, González Muro afirmó que las instituciones ponen trabas para entregarlo, argumentando que es un tratamiento costoso.
“Sí, es un medicamento caro, pero es la mejor herramienta para prevenir el VIH. Parece que las instituciones creen que lo pagan de su sueldo y por eso no lo quieren entregar”, denunció.
En el ISSSTE, la situación es aún más crítica, ya que el medicamento preventivo simplemente no está disponible.
“Los pacientes van a la farmacia y solo les dicen que no hay. Cuando hay, les piden que cada mes vayan a consulta y se hagan estudios para poder recibirlo, lo cual es innecesario y solo complica el acceso al tratamiento”, señaló.
Alarma por aumento de casos de VIH
A esta problemática se suma el incremento de casos de VIH en Aguascalientes, pues según datos recientes, en los últimos dos años, el número de personas con VIH atendidas en Capacits pasó de 700 a 924, un aumento significativo que, de acuerdo con González Muro, no se debe a una mayor detección por parte del gobierno, sino a que muchas personas llegan al servicio en etapas avanzadas de la enfermedad.
“Hace un mes tuvimos un usuario aquí, lo canalizamos al hospital y lamentablemente falleció a los 26 años. La desinformación y los estigmas siguen incrementando el virus”, lamentó.
A nivel estatal, se estima que más de 2 mil personas viven con VIH, considerando a los pacientes atendidos en IMSS, ISSSTE y Capacits, sin embargo, el acceso al tratamiento preventivo sigue siendo muy bajo, con menos de 200 personas utilizando PrEP a pesar de ser un medicamento gratuito.
Mujeres casadas, el nuevo grupo en riesgo
González Muro advirtió que, según las tendencias recientes, las nuevas infecciones se están registrando principalmente en personas de entre 24 y 32 años, no obstante, en los últimos dos años, el número de mujeres casadas y heterosexuales mayores de 30 años que adquieren el virus, ha ido en aumento.
“Esto viene mucho también del esposo. Por eso hacemos un llamado a que todas las personas, mujeres, hombres, quien lo necesite, vengan y se realicen sus pruebas. Es mejor saber siempre”, enfatizó.