La exestrella infantil Rory Callum Sykes fue una de las víctimas mortales que dejaron los actuales incendios forestales de Los Ángeles, California. El joven de 32 años estaba en la parcela de su familia, donde tenía su propia cabaña, cuando el incendio Palisades devoró la propiedad el pasado miércoles 8 de enero.
“Con gran tristeza tengo que anunciar la muerte de mi hermoso hijo, quien perdió la vida en los incendios de Malibú”, escribió su madre Shelley Sykes en X (antes Twitter).
De acuerdo con The Independent, Sykes vivía en una cabaña en la finca de su familia en Malibú cuando se desató el incendio. Su madre dijo que no pudo apagar las llamas debido al corto de suministro de agua.
La trágica muerte de Sykes pone de relieve el impacto más amplio de estos incendios, que siguen amenazando miles de vidas y propiedades. Su fallecimiento también arroja luz sobre los desafíos que enfrentan las personas con discapacidades en situaciones de emergencia. Lo anterior, porque Rory era ciego de nacimiento y tenía parálisis cerebral.
“No pude apagar las cenizas del tejado con una manguera porque el agua estaba cortada. Ni siquiera los 50 valientes bomberos tuvieron agua en todo el día”, argumentó la mujer.
It is with great sadness that I have to announce the death of my beautiful son @Rorysykes to the Malibu fires yesterday. I’m totally heart broken. British born Australian living in America, a wonderful son, a gift born on mine & his grandmas birthday 29 July 92, Rory Callum… pic.twitter.com/X77xyk83gx
— Shelley Sykes (@shelleysykes) January 9, 2025
El actor australiano se volvió famoso por aparecer en distintos episodios del programa de televisión británico Kiddy Kapers, que era presentado por su madre. Además por sus inspiradores discursos sobre superar la discapacidad.
“RORY CALLUM SYKES SUPERÓ MUCHAS DIFICULTADES”
“Superó muchas dificultades con cirugías y terapias para recuperar la vista y poder aprender a caminar. A pesar del dolor, seguía entusiasmado por viajar por el mundo conmigo, desde África hasta la Antártida”, escribió su madre.
Las autoridades han descrito los incendios en Pacific Palisades y Eaton como algunos de los más destructivos en la historia de California. Este lunes 13 de enero los equipos de rescate se reanudaron para la búsqueda de cuerpos en los suburbios de Los Ángeles, con los pronósticos de fuertes vientos que amenazan con reavivar los incendios, cuyo saldo se eleva ya a 24 muertos.
En el séptimo día de esta catástrofe, que ha calcinado comunidades enteras de las afueras de la segunda ciudad más grande de Estados Unidos, empezaron a vislumbrarse los primeros atisbos de vida normal, a pesar de que más de 90,000 personas siguen evacuadas.
Algunas escuelas volvieron a abrir sus puertas y los equipos de baloncesto de la ciudad, los Lakers y los Clippers, anunciaron que retoman la competición. N
(Publicado en cooperación con Newsweek. Published in cooperation with Newsweek)