Un reconocido zoólogo experto en cocodrilos fue sentenciado este jueves 8 de agosto en Australia a más de 10 años de cárcel por el abuso sexual y la muerte de decenas de perros, además de otros crímenes.
Adam Britton, de 53 años, se declaró culpable de 63 cargos de bestialidad, crueldad animal y posesión de material de abuso de menores. El juez Michael Grant, de la Corte Suprema del Territorio Norte australiano, calificó los actos como “indescriptibles” y “grotescos” al pronunciar su sentencia.
La televisión nacional australiana ABC dijo que Britton adquirió en internet 42 perros entre 2020 y 2022, y prometió a los dueños que les daría un “buen hogar”.
Sin embargo, ABC dio a conocer que Britton se grabó a sí mismo violando y matando perros en un contenedor de carga en su propiedad en la ciudad de Darwin. Él mismo compartió las imágenes en la red Telegram.
Britton, quien fue arrestado por la policía en 2022, nació en Reino Unido y era un reconocido experto en cocodrilos en Australia, donde trabajó en producciones de la BBC y National Geographic. Será elegible para obtener libertad bajo fianza en abril de 2028, pero se le prohibirá poseer animales el resto de su vida.
“LOS DELITOS DEL ZOÓLOGO ESTABAN MOTIVADOS POR UN TRASTORNO POCO COMÚN”
De acuerdo con el abogado del zoólogo, citado por BBC, sus delitos estaban motivados por un trastorno poco común que provocaba intereses sexuales intensos y atípicos. En el tribunal se dio lectura a una carta de Britton, en la que se disculpaba por sus “crímenes degradantes”.
“Lamento profundamente el dolor y el trauma que causé a animales inocentes y, en consecuencia, a mi familia, amigos y miembros de la comunidad. Buscaré un tratamiento a largo plazo y encontraré un camino hacia la redención”, refiere la misiva, en donde afirmó que sus familiares no estaban al tanto ni involucrados de ninguna manera.
A tenor del medio británico, que tuvo accedo a documentos judiciales, Britton torturó al menos a 42 perros y mató a 39 de ellos. Los archivos solo pormenorizan sus crímenes durante el año y medio anterior a su arresto, pero incluso así ocupan más de 90 páginas.
“De niño era sádico con los animales, pero lo había reprimido. En los últimos años lo volví a dejar salir y ahora no puedo parar. No quiero hacerlo”, escribió en un mensaje entregado al tribunal. N
(Con información de AFP)